El líder del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, se convirtió en protagonista de la jornada por el discurso pronunciado en un mitin desde Cornellá, Barcelona, en contra de la "inmigración ilegal". En definitiva, fue un intento para comprar el discurso de Vox; palabras que no han pasado desapercibidas en televisión. Hasta Rubén Amón, colaborador de Espejo Público, se ha pronunciado rotundamente en contra.
Feijóo pidió el voto "a todos aquellos que se dan cuenta que Cataluña tiene los índices de criminalidad, de robos y de hurtos y de reincidencia de los más altos de España”. Pero también a aquellos que "están a favor de la inmigración legal, pero los que no admiten que la inmigración ilegal se deje en nuestras casas ocupando nuestros domicilios y nosotros no poder entrar en nuestras propiedades".
El espacio matinal de Antena 3 abordaba distintos asuntos respecto a los jóvenes españoles que abandonan el país en busca de mejores opciones laborales. Y aprovechando la percha, Amón ha cargado contra el "discurso xenófobo de Feijó": "A todos nos ha sorprendido. Salió un estudio de Funcas, que hablaba de que la inmigración ilegal en España son 700.000 personas".
Una joven española cuenta su experiencia laboral en el extranjero:
— Espejo Público (@EspejoPublico) May 8, 2024
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Centrado en esa cifra, el colaborador ha especificado que "600.000 son de países latinoamericanos", pero aportando un matiz: cuando se habla de "ilegal" se corresponde "únicamente con quien se le ha caducado un visado turístico o al que es víctima de una Administración lenta para homologar los papeles".
Ha sido entonces cuando ha señalado la "creación de este vínculo perverso" alimentado por el líder popular: "Encima, va Feijóo y la vincula a la okupación. Lo digo porque el gran flujo es de América Latina y, desde luego, 'ilegal' no significa 'delincuente'".
¿Un acercamiento del PP a Vox?
Después de darse a conocer el discurso íntegro, determinados análisis señalaron un acercamiento todavía mayor hacia la formación Vox, es decir, sus socios principales en los gobiernos de coalición que mantienen en distintas comunidades autónomas y municipios.
Por ejemplo, Ignacio Gárriga, candidato de Vox, se pronunció en unos términos similares una jornada antes en El Debat de laSexta previo a las elecciones: aseguró que Cataluña “alberga una de cada tres violaciones de toda España” promovidas por las "manadas de agresores sexuales ilegales de nuestras calles". "Aquellos que se llenan la boca del feminismo han convertido a los transportes públicos en un lugar de riesgo”, reiteró.
Al margen, Feijóo también aprovechó la figura de Felipe González para cargar contra Pedro Sánchez. A su juicio, con él "no mandarían los separatistas en España": "Con Felipe González no se hubiese pactado con los separatistas en los ayuntamientos catalanes. Con Felipe González se hubiese hecho una España igual para todos. Porque es lo que era el PSOE antes y que ha dejado de serlo”, sentenció.
Pero todavía hubo más. Durante el desarrollo del acto, Feijóo habló abiertamente de una España "igual para todos", construida durante la etapa de González como presidente del Gobierno. Fue entonces cuando acusó a los socialistas actuales "de haberse alejado de su papel como partido de Estado, con críticas a Sánchez por dar una supuesta prioridad a su permanencia en el poder sobre los resultados de las elecciones.
En última instancia, solicito a los catalanes que concentrasen el voto en el PP para evitar un Ejecutivo integrado por el PSOE de la autonomía, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y Junts: "Dividir votos es restar escaños". Es más, avisó de que no pueden gobernar los independentistas, pero tampoco los socialistas, a los que consideró el sucedáneo del proceso soberanista.
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