Con el telón de fondo del discurso de Vox ante su última propuesta en materia de inmigración, primero defendiendo un plan de “remigración” para deportar a ocho millones de inmigrantes de España a pasar después a negar haber dado cifras exactas, el foco ha estado situado en la diputada Rocío de Meer quien, en una conexión en directo con el programa ‘Todo es mentira’, la bronca ha estado servida.

Al entrar en la tarde de este martes en directo con Risto Mejide para debatir sobre esta cuestión, ha comenzado defendiéndose con las siguientes palabras: “Es mentira lo que se dice que hemos dicho. Les mandaremos el correspondiente burofax para que rectifiquen. No es verdad que hayamos dicho que haya que deportar a ocho millones de personas, es absolutamente falso. Hemos hablado de que hay que hacer deportaciones. (…) Ustedes se podrán reír mucho en este programa, pero, lo cierto es que hay españoles que lo están pasando realmente mal y no creo que les haga mucha gracia”, ha comenzado.

Sin achantarse, Mejide, en su primera contestación, ha reprochado el tono de la portavoz de Vox nada más comenzar su intervención en riguroso directo: “Con todos mis respetos, si ha venido aquí a hacer un mitin de Vox, se ha equivocado de programa”. Una respuesta que a De Meer no le ha gustado y, justo en este momento, ha comenzado el rifirrafe.

Sin quedarse en este punto, el presentador del programa de Cuatro le ha reprochado a su vez que, si la dirigente de Vox ha entrado en directo para “amenazar y soltar su discurso y su mitin” ha advertido que le enviará “el burofax que quiera”: “Pero le hemos dado la oportunidad de matizar esas palabras”, ha recordado con énfasis.

"Podrían cambiar el rótulo y poner: 'Todo es mentira miente abiertamente sobre lo que dice Vox’”, ha cortado la portavoz de Vox sin dejar de hablar al presentador del programa de televisión vespertino. "Si no respetamos el turno... Yo la he respetado. Si usted viene aquí a insultarnos y decirnos que lo le gusta que este programa sea de humor, me parece muy bien, pero tiene otros programas para hacerlo", ha replicado Mejide.

Lejos de un entendimiento entre ambas partes, De Meer ha continuado con su postura defendiendo que el programa “le ha insultado” a ella y a Vox “mintiendo deliberadamente”. Debido a estas últimas palabras, el presentador ha terminado adoptando la definitiva decisión de cortar la conexión en directo: “Muchas gracias, buenas tardes, ahora soy yo el que la deporta de este programa”, ha claudicado cortándole la palabra y la imagen a la dirigente de Vox.

Debido a la trascendencia de esta cuestión en las últimas horas, desde el partido de Santiago Abascal han interpretado este encontronazo como una victoria propia al considerar que, cuando acuden a “contar la realidad que sufren los españoles” a la televisión, “no aguantan ni tres minutos”.

 

Vox da marcha atrás y matiza sus palabras en cuestión de horas

En la rueda de prensa convocada este lunes por la tarde, De Meer expresó de manera literal las siguientes declaraciones: “Si de 47 millones de habitantes, más o menos 7 o más de 7 millones, porque tenemos que tener en cuenta la segunda generación… 8 millones de personas han venido de diferentes orígenes en muy corto periodo de tiempo. Es extraordinariamente difícil que puedan adaptarse a nuestros usos y costumbres, pues las consecuencias son las que estamos viendo. Las calles y plazas no pertenecen a los españoles, a quienes siempre pertenecieron. Nosotros pensamos que hay una solución mala y menos mala. […] Tendrán que volver a sus países. Apostamos por este proceso de remigración porque hay algo importante que preservar”.

Unas palabras que no han tardado en trascender al plano político con las consiguientes críticas pero que, desde la formación de Abascal, han negado que se dijeran cifras redondas como la de “ocho millones” que se recogieron de la mencionada rueda de prensa.

“Están nerviosos, ya están mintiendo y manipulando otra vez. Vox no ha dicho el número de los que deben ser deportados, simplemente porque no lo sabemos. Son todos los que hayan venido a delinquir, los que pretendan imponer una religión extraña, los que maltraten o menosprecien a las mujeres, los que hayan venido a vivir del esfuerzo de los demás. Y todos los ‘menas’, porque los menores tienen que estar con sus padres. No sabemos cuántos son. Cuando lleguemos al gobierno lo sabremos. Y se irán todos”, ha esgrimido a modo de defensa Abascal este martes por la mañana.

Le ha seguido el paso la propia De Meer a través de redes sociales: “No sé si son uno, mil, cien o un millón; habrá que expulsar a los que han venido aquí a vivir de los demás, a delinquir, odiarnos, imponer su religión incompatible, quienes piensan que las mujeres debemos caminar cinco pasos por detrás, quienes mutilan a niñas, machetean en nuestras calles en los fines de semana. Todos esos fuera, todos. No sé cuántos son, lo sabe el Gobierno”, ha terminado acusando.

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