El pasado lunes, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, anunciaba una “reforma fiscal progresiva” que pasa por tres grandes ejes y beneficiará al 97% de los ciudadanos. Nada que ver con las medidas que proponen el PP y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en estos términos.

De esa manera lo ha detallado la periodista Àngels Barceló para referirse a la “batalla fiscal” que se ha librado en las últimas semanas, especialmente desde que el presidente andaluz, Juanma Moreno Bonilla, anunciase en la línea de la líder madrileña la eliminación del impuesto de Patrimonio, una cantidad que solo afecta a unos pocos muy ricos.

La “trampa” del PP

La medida de Puig pasa por un aumento del 10% de la cuantía exenta de tributación a todos los ciudadanos con renta anual de hasta 60.000 euros, nuevos tramos rebajados del IRPF para dicho ejercicio y una ampliación del 10% en las deducciones existentes de manera que el límite de renta pasaría de 25.000 a 30.000 euros.

Esta línea de actuación beneficiará a la inmensa parte de los ciudadanos. Al contrario que la de Ayuso, cuya reducción del IRPF supuso un ahorro nulo a las rentas inferiores de 12.000 euros, de cinco euros para las rentas de hasta 30.000 euros y de 11 euros para las de hasta 60.000 euros. Por contra, solo el 7% de la población madrileña ahorrará 4.500 euros.

A ello hay que sumarle otras medidas polémicas de la lideresa regional, como las conocidas como “becas para ricos”, destinadas a familias que cobran más de 100.000 euros al año. Las ayudas están destinadas a las rentas más altas, pese a que el equipo de la responsable de Sol haya defendido en reiteradas ocasiones que no es así. Esto es porque ha ocultado las palabras “per cápita”, de forma que los 20.000 euros de renta de los que se habla desde el Ejecutivo regional obedecen a la cuantía por miembro familiar.

Àngels Barceló se ha referido a todo ello, aunque ha lamentado también la posición socialista tras el anuncio de Puig. Con todo, se ha referido a la “trampa” del PP y asevera que la medida del valenciano no tiene “nada que ver” con lo que plantean los populares.

La opinión de Àngels

Eso sí, mantiene que el anuncio del presidente valenciano “se convirtió en munición para el PP, que señala las contradicciones del PSOE que en Madrid dice una cosa y en Valencia hace la contraria”. “En el debate fiscal, que centra ahora mismo la conversación política, los socialistas defienden que no es tiempo para bajadas fiscales. Pero da la sensación que todos se mueven a golpe de respuesta de lo que hace el contrario”, añade.

“Empezó el presidente andaluz con la supresión del impuesto del patrimonio, respondió el PSOE con los impuestos a los más ricos, y Ximo Puig que se juega su reelección, se adelanta a la reforma fiscal del Gobierno, todavía muy poco concreta y lanza la bajada de impuestos, a la que amaga con sumarse otro presidente socialista, con elecciones a la vuelta de la esquina, Javier Lambán, que admite la posibilidad de cambiar la fiscalidad en su comunidad”, apostilla.

“Y en medio de esta competición en España, el consenso que parece que empieza a haber a nivel internacional sobre la fiscalidad. El Banco Central Europeo ha empezado a fijarse en las medidas fiscales que proponen los diferentes gobiernos y propone subidas de impuestos a los que más tienen y a las empresas con más beneficios, lo contrario de lo que defiende el PP. Bienvenidos al mercado fiscal”, concluye.