José Antonio Reyes circulaba como mínimo a 187 km/hora el día del accidente de tráfico que terminó con su vida hace ahora diez meses, según ha adelantado esta tarde la Cadena Ser.

El futoblista circulaba por la A-376 a la altura de Sevilla cuando su vehículo, un Mercedes S 550 se salió de la carretera, volcó y se incendió a 200 metros de la autovía. El siniestro terminó con la vida del jugador del Real Madrid, Atlético de Madrid  y Sevilla, entre otros y con la de su primo, Jonathan Reyes. Además, su otro primo, Juan Manuel Calderón, resultó herido.

La conclusión a la que ha llegado la Guardia Civil es que el accidente-provocado por el pinchazo de la rueda izquierda del coche- se produjo mientras el jugador trataba de adelantar a otro vehículo a una velocidad de al menos 187 kilómetros/hora.

El informe pericial ha llegado ya al juzgado de Alcalá de Guadaíra que investiga los hechos.

José Antonio Reyes, que entonces jugaba en el Extremadura de Almandralejo, falleció a la edad de 35 años.