El próximo viernes 8 de marzo tendrá lugar la celebración del Día Internacional de la Mujer. Como cada año, en este 2024 millones de mujeres de todo el mundo alzarán sus voces para celebrar los avances conseguidos tras muchos años de lucha feminista, pero, sobre todo, para recordar que sigue habiendo una desigualdad real entre hombres y mujeres y que aún queda mucho por hacer. ¿Pero por qué tiene lugar el Día de la Mujer el 8M? Te lo contamos.

¿Cuál es el origen y la historia del 8M?

El 8M tiene sus orígenes en las primeras huelgas manifestaciones feministas y obreras llevadas a cabo durante el siglo XX:

La huelga textil de 1908 y la huelga de las camiseras de 1909

El antecedente principal del Día Internacional de la Mujer fue la huelga de las trabajadoras textiles de 1908, en la que 15.000 mujeres marcharon por la ciudad de Nueva York protestando por las penosas condiciones de trabajo y demandando mejores salarios, reducción de la jornada laboral y el derecho al voto.

Apenas dos meses después, el 3 de mayo de 1908 se organizó en Chicago un acto denominado "Día de la Mujer" dedicado a denunciar la opresión de las mujeres obreras, el cual fue presidido por importantes socialistas de la época como Corinne Brown y Gertrude Breslau Hunt. En consecuencia, el Comité Nacional de la Mujer del Partido Socialista de los Estados Unidos encargó a sus simpatizantes dedicar el último domingo de cada febrero a reivindicar el sufragio femenino.

En 1909 tuvo lugar la primera conmemoración conocida del Día de la Mujer, cuando una organización de Mujeres Socialistas marcó el inicio de esta tradición anual de lucha por los derechos de las mujeres al celebrar el día en apoyo a las trabajadoras textiles de Nueva York.

En noviembre de ese mismo año daba comienzo un nuevo movimiento obrero en Nueva York con la huelga de las camiseras, también llamada el "levantamiento de las 20.000", en la que participaron principalmente mujeres inmigrantes de origen europeo o de familia judía que trabajaban en las fábricas textiles de camisas de la ciudad.

Primera conmemoración del 8M

En 1910, en la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en Copenhague, se insistió en el derecho a voto de las mujeres y se aprobó por unanimidad la propuesta de la socialista alemana Clara Zetkin, que proclamaba el Día Internacional de la Mujer Trabajadora sin establecerse una fecha concreta para su celebración.

Finalmente, en 1911, tal y como se había acordado, se conmemoraba por primera vez el 19 de marzo en Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Durante la jornada se llevaron a cabo mítines con más de un millón de asistentes en los que se exigió el sufragio universal, el derecho a ocupar cargos públicos, el derecho al trabajo, el acceso a la formación profesional y la no discriminación laboral por el mero hecho de ser mujer.

El incendio que sí ocurrió

​No había pasado una semana desde la conmemoración cuando, el 25 de marzo de 1911, 123 trabajadoras y 23 trabajadores, casi en su totalidad inmigrantes, murieron en el incendio de la fábrica Triangle Shirtwaist Company de Nueva York tras ser encerrados sin posibilidad de salir del edificio. Un suceso macabro que trajo consigo reformas en la legislación laboral de Estados Unidos y que sirvió de referencia para la lucha por los derechos laborales de las mujeres trabajadoras.

La leyenda del humo morado

Durante décadas se ha creído que el origen del 8M se debe a otro incendio: el de la fábrica Cotton Textil Factory de Nueva York. La leyenda cuenta que en este lugar murieron 129 mujeres a manos del propietario de la empresa que, ante la huelga de sus trabajadoras en 1908 prendió fuego al edificio con ellas dentro. La misma leyenda relata que las telas en las que estaban trabajando las obreras en el momento de lo que se calificaría como "accidente" eran de color violeta, siendo el humo que salía de la fábrica de un color morado intenso que podía verse a kilómetros de distancia. No obstante, esta historia forma parte de la mitología y el simbolismo del feminismo occidental y nunca ha podido probarse.

Otros países se suman a la causa

Poco a poco, los países fueron sumándose al gesto a favor de los derechos de las mujeres. En 1913, mientras los movimientos a favor de la paz surgidos en vísperas de la Primera Guerra Mundial, las mujeres rusas celebraron el último domingo de febrero su primer Día Internacional de la Mujer.

En Alemania y Suecia, en 1914, también se aunaron los mítines de apoyo a la mujer con los contrarios a la guerra, conmemorando el 8 de marzo de ese año, por primera vez y de manera oficial, el Día Internacional de la Mujer. En España, no fue hasta el 1936 durante la Segunda República que se conmemoró este día, liderado por la dirigente comunista Dolores Ibárruri, conocida como "la Pasionaria".

Las Naciones Unidas fijan el día en 1975

Bajo este contexto histórico, las Naciones Unidas, que en 1945 habían firmado en San Francisco una carta que constituyó el primer acuerdo internacional en defensa de la igualdad de ambos sexos como derecho fundamental, fijaron en 1975 el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer. Un día en el que, definitivamente, no se celebra ni se recuerda un hecho positivo, tratándose en cambio de una reivindicación, un reclamo en contra de la discriminación que sufren las mujeres.

¿Por qué es importante celebrar el Día de la Mujer?

Conmemorar el Día Internacional de la Mujer es, en primer lugar, una forma de reivindicar todas las luchas feministas que han tenido lugar a lo largo de la historia y que han permitido estar más cerca de la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Por otro lado, el 8M funciona como un altavoz que muestra implacablemente el machismo y la violencia contra las mujeres que aún persiste en nuestra sociedad y que invita a debatir de qué forma se pueden combatir dichas desigualdades.

El Día de la Mujer es además una muestra de respeto a todas las que maltrató el sistema patriarcal, a las que el machismo les arrebató su independencia, sus sueños y hasta su vida, y que, a pesar de ello, se atrevieron a caminar para que nosotras pudiéramos correr. Por eso, aprovechamos esta fecha para recordar a todas esas figuras históricas del feminismo como Rosa Parks, Clara Campoamor o Virginia Wolf que han servido de referencia para millones de mujeres y nos han inspirado a recoger el testigo.

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