Después de 44 años negando la mayor, la banda terrorista ETA ha reconocido su autoría en dos atentados que se suman a los 2.604 que ya había asumido con anterioridad. Se trata de la matanza de 1974, en la cafetería Rolando de la calle del Correo de Madrid, donde una bomba acabó con la vida de 13 personas y otras 40 resultaron heridas. Dicha cafetería era frecuentada por policías debido a la cercanía de la Dirección General de Seguridad (DGS).

Además, asume la autoría del triple asesinato en Tolosa en 1981 donde confundieron a tres ciudadanos con agentes de la Policía.

El diario Gara publica en su edición de este martes una información en la que apunta que ETA elaboró un último Zutabe (una especie de boletín interno de la banda), fechado un mes antes del anuncio de su disolución, en el que pone cifras a la actividad terrorista que desarrolló durante medio siglo.

En el documento la banda asegura que ha asesinado a 758 personas en sus atentados, alrededor de un centenar menos de las que le atribuyen el Ministerio del Interior y las asociaciones de víctimas.

Y es aquí donde llega la polémica, pues las asociaciones de víctimas del terrorismo critican que ETA no reconozca que "asesinó a 853 personas.

“Inaceptable” y "una humillación" para las víctimas

El Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco, Covite, cree "inaceptable" que ETA no haya reconocido que "asesinó a 853 personas", muertes que ha recordado en un comunicado.

ETA "asesinó a 853 personas, hirió a 2.597, extorsionó a unas 10.000 y forzó al exilio a 100.000 para defender un proyecto político antidemocrático y totalitario".

Además, considera "una humillación" para las víctimas del terrorismo que "su propaganda" se difunda antes del 'Día de la Memoria', que se celebra el 10 de noviembre. "Esto supone que "la memoria que quieren construir los terroristas se basa en el blanqueamiento de su pasado criminal", apunta.

El colectivo presidido por Consuelo Ordóñez ha denunciado, una vez más, "el asesinato selectivo y sistemático de centenares de personas en el contexto de un conflicto inexistente que los herederos de ETA se empeñan en mantener para fundamentar su historia y blanquear su responsabilidad sobre los crímenes cometidos".

Nerín, muerto en "un enfrentamiento inesperado"

La banda recuerda que el 9 de agosto, a las 18:00 horas, hizo estallar su último artefacto explosivo en las galerías de la Plaza Mayor de Mallorca -sin víctimas-, y apunta que, más tarde, se produjo "el enfrentamiento inesperado" que acabó con la muerte del policía francés Jean-Serge Nérin.

En su balance de actividad terrorista, ETA concreta que, a lo largo de su historia, cometió 365 atentados contra la Guardia Civil, en los que mató a 186 efectivos; 215 acciones contra Cuerpos Policiales, en los que perecieron 139 agentes; y 147 contra el Ejército, en el que fallecieron 101 militares -entre ellos, enumera un almirante, dos vicealmirantes, doce generales, 31 coroneles, siete capitanes y once comandantes-, además de once funcionarios civiles de la Armada. En esta línea, precisa que cometió "más de 800 acciones armadas desde 1975 a 1982".

La banda reproduce en el documento la declaración de "reconocimiento del daño causado" que ETA emitió el día 8 del pasado mes de abril, en la que pedía "perdón" solo a las víctimas que no estuvieron relacionadas "directamente" con lo que denomina el 'conflicto vasco'.