El asesinato de una niña de 12 años a manos de otras dos, de 12 y 13 años, sigue conmocionando a Alemania. La confesión de las dos menores ha provocado un auténtico revuelo en el país germano, convirtiéndose en suceso protagonismo de la prensa y de las conversaciones diarias.

La víctima se llamaba Luise, y su desaparición fue tomada en consideración el pasado sábado cuando, su familia, extrañada, denunció que no había regresado a su casa, ubicada cerca de la ciudad de Freudenberg, en Renania del Norte-Westfalia. El cuerpo de la joven fue hallado el domingo, en una zona boscosa que no estaba lejos de su hogar.

El escalofriante suceso derivó en respuestas políticas: "La niña murió como resultado de numerosas heridas de cuchillo y por la pérdida de sangre", aseguró el fiscal de Coblenza, Mario Mannweiler, en una comparecencia frente a los medios de comunicación.

“Las dos menores dieron información sobre el caso y, poco después, acabaron reconociendo el asesinato”, añadió el jefe de la Policía de Coblenza, Florian Locker.

Los investigadores, por el momento, no han encontrado el arma del asesinato. Tampoco se han conocido las causas que llevaron a las dos jóvenes a asesinar a la joven de 12 años, aunque, según han reconocido fuentes consultadas por los medios locales, las tres se conocían.