La indignación en el Rayo Vallecano sigue sin cesar. Aunque los comentarios inadmisibles sobre violar a una jugadora por parte del entrenador del equipo femenino Carlos Santiso han hecho explotar a la opinión pública, el descontento, tanto de la afición, como de cierta parte del propio club viene de lejos.

Las distintas peñas rayistas y los accionistas minoritarios del Rayo denuncian no solo la continuidad de Santiso como preparador del femenino tras las polémicas declaraciones, sino también la ''nefasta gestión'' del presidente Raúl Martín Presa. Cabe destacar que desde este medio nos hemos puesto en contacto con el club y no han querido hacer declaraciones.

Nacho Herrero, vocal de Accionistas ADRV, asegura que llevan ''más de 10 años intentando que el mundo se entere de la falta de transparencia''. ''Nos alegra que la gente vaya conociendo lo que hace el presidente pero nos apena mucho que salgamos en los medios por casos como este, que no debería existir en el siglo XXI. También la imagen que está dando el club'', afirma.

El equipo femenino ''molesta''

En una entrevista con ElPlural.com, Herrero explica que Presa está intentando cambiar el foco de su decisión de mantener al entrenador presionando a las jugadoras. ''Ha empezado una gira por medios afines diciendo que son ellas las que le han pedido que no cese a Santiso, que se encuentran muy a gusto con él y que no se corresponde su comportamiento con ellas con los audios'', dice.

''Tenemos la sensación de que es una provocación. En un momento en el que la opinión pública está siendo tan firme y tan contundente con comentarios degradantes, asegurar que están encantadas con él es ponerlas en el disparadero'', denuncia.

Con todo, señala que no cree que su objetivo sea destruir el Rayo Vallecano, pero sí tienen la sensación de que ''la sección femenina le molesta y para él podría ser prescindible''. ''El máximo accionista va diciendo cuando hay bajas existencias en el estadio que tiene que ser sostenible y no sostenido. Se olvida que recibe una subvención de la Comunidad de Madrid'', dice.

''También comenta que hace diez años el club estaba arruinado y ahora está en semifinales de Copa. Lo que no habla es que cuando llegó el femenino ganaba títulos y era uno de los pioneros y ahora es último de la categoría y solo salta a los medios por noticias negativas sobre su gestión'', asevera.

Echar a Presa

Preguntado por la posibilidad de echar a Presa, Herrero asegura que ''es una situación muy compleja''. Detalla que ''ahora mismo es el máximo accionista y no hay manera de quitarle la propiedad porque no quiere vender''. ''Hemos hecho varias ofertas con un precio por acción muy superior y nunca las ha considerado'', dice.

También cualquier recogida de firmas para que cese al entrenador ''es inútil''. ''Se ha convertido en adalid del perdón, ha perdonado al entrenador en nombre del club sin importarle el daño que eso pueda repercutir'', insiste el portavoz de ADRV.

Asimismo, la asociación de accionistas minoritarios denuncia las presuntas irregularidades que se están cometiendo desde la directiva del club: ''Hemos presentado varias demandas que afectan al club y a la Fundación del rayo, que no presenta cuentas desde hace muchos años''.

Irregularidades en la gestión

Pone el foco en el convenio de cesión del estadio de Vallecas, que -dice- ''tendría que cumplirse a rajatabla''. ''Llevamos teniendo unas obras que se están retrasando continuamente porque el presidente está intentando convencer a la Comunidad de Madrid de que el proyecto no termina de gustarle del todo'', insiste Herrero.

Por eso, exigen a los partidos que vigilen la gestión de bienes y fondos públicos del equipo. ''Tienen el poder y la capacidad de vigilar y sancionar por los incumplimientos en los convenios o en igualdad de género. No es agradable que el Rayo reciba una subvención por tener al femenino en Primera División si después el trato hacia la mujer va a ser este'', denuncia.

Vox y Santiso, una provocación

Las conversaciones de esta organización con los partidos políticos han sido constantes. Sin embargo, hay una formación con la que no han podido reunirse: Vox. Algo que choca con su presencia recientemente en los partidos. 

''Es una auténtica provocación'', dice Herrero, una opinión que también comparten las peñas rayistas. ''Ver a gente de ultraderecha en el palco, así como lo de Santiso, es otra provocación más del presidente al barrio de Vallecas. Presa es consciente de cómo es la afición y sabía que esto nos iba a indignar'', asegura otro, quien insiste en la estrategia de acabar con el femenino.

''Con el Rayo femenino existe voluntad de que desaparezca. Solo hay que ver la falta de inversión y los problemas extradeportivos a los que ha sometido a las jugadoras (viajes y nóminas sin pagar, sin médico, acceso al gimnasio vetado, etc)'', insiste.

En la misma línea se ha pronunciado el presidente de la Peña Rayista 2004 y miembro de Peñas del Rayo Vallecano, Dámaso Barroso. ''No estamos de acuerdo en el mantenimiento de un entrenador que ha hecho unas declaraciones que chocan con los valores del club'', ha dicho ante los medios.

Ha denunciado la ''campaña de márketing'' del dirigente del club ''vendiendo camisetas contra la homofobia, por ejemplo'', así como las irregularidades y la falta de transparencia. ''Las obras del estadio llevan licitadas desde junio de 2020 y el propio presidente se ha permitido el lujo de interferir''.

Sobre la ultraderecha, Barroso ha afirmado que no les gusta su presencia en el campo ya que ''no comulga con los valores'' de Vallecas: ''Parece que el presidente del Rayo esté siempre posicionado en un lado muy extremista frente a la filosofía mayoritaria del barrio''.

Los ultras, invitados de honor

Y es que el partido de extrema derecha ha vuelto al palco del Estadio de Vallecas. Rocío Monasterio, diputada de Vox, ha acudido este miércoles como invitada de honor a ver el partido contra el Betis, en una histórica semifinal de la Copa del Rey.

Algunas fuentes señalan que los líderes del PP madrileño Isabel Díaz Ayuso y José Luis Almeida también habían sido invitados al encuentro por el presidente rayista, aunque finalmente no asistieron. Sí lo hizo la líder de la formación ultra en la Comunidad de Madrid, repitiendo la estampa de hace un año. 

Esto hizo enfadar de nuevo a parte de la afición, que tiene una tradición política de izquierdas. Así, a lo largo de todo el partido se pudieron escuchar diferentes cánticos contra la diputada, así como contra la directiva, a la que acusan de una ''mala gestión''.

No condenan los audios

Por si esto fuera poco, este jueves Vox ha bloqueado una declaración institucional para condenar los audios machistas de Carlos Santiso, entrenador del Rayo Femenino, en los que aseguraba que había que violar a una jugadora para crear espíritu de equipo. ''No lo contemplamos'', así se ha justificado el partido ultra.

La iniciativa fue presentada por Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid, tras haberse reunido con peñas del club. Según ha explicado su portavoz en la Cámara madrileña, Carolina Alonso, estos denuncian ''la falta de transparencia de la directiva''. ''Han recibido 35 millones de euros de dinero público y ha incumplido con el convenio que hay entre la Comunidad de Madrid y la institución", ha asegurado.

Alonso ha informado, además, de que su grupo ha registrado distintas comparecencias. Primero la de Marta Rivera de la Cruz, consejera de Cultura y Deportes, para ''dar explicaciones al respecto de las irregularidades'', y la de representantes de la afición para que puedan ofrecer su punto de vista de esta situación ''tan desastrosa''. 

Polémica con la Fundación del Rayo

La indignación también ha llegado a la Fundación Rayo Vallecano. Las familias de alumnos y alumnas de la Escuela de Fútbol de esta organización han denunciado la ausencia de ropa y el incumplimiento por parte de dicha Escuela.

Según el medio rayista Matagigantes.net, desde noviembre, fecha en la que empezaba la liga, solo se les ha hecho entrega de la primera equipación. Debido a que esta situación se repite todos los años, los padres se han negado a pagar las dos últimas cuotas hasta que no les proporcione la ropa.