Desde la aprobación del primer estado de alarma decretado como consecuencia de la crisis del coronavirus, el Gobierno de Pedro Sánchez centraliza los datos y los mandatos en un mando único con el ministro de Sanidad, Salvador Illa, liderando un comité científico-técnico del Covid-19. Según publica El Confidencial, la Generalitat de Cataluña estaría utilizando la coyuntura para desgastar tanto al Ejecutivo central como al propio Illa.
El Departament de Salut del Govern presidido por Quim Torra está obligado a suministrar información al Ministerio de Sanidad, pero no está cumpliendo su cometido. Si informa sobre el número de contagiados, las altas y los decesos; pero no aporta otra información pormenorizada a la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Renave), cuya gestión técnica comanda el Instituto de Salud Carlos III (que funcionalmente depende de Sanidad).
Ante pandemias de este tipo, y máxime ante la gravedad de la situación, son necesarios todos los datos posibles tales como género, edad de los pacientes, factores de riesgo, tiempos de hospitalización… Sin embargo, la Generalitat de Cataluña es con mucho la que menos información ha reportado a Sanidad al respecto.
De los casi 45.000 casos, Torra tan solo ha informado de manera íntegra en menos de 2.000 (4,3% concretamente). Asturias y Aragón son las comunidades autónomas que completan el podio de las que menos información detallan a Renave, con un 34.3% y 60,2% respectivamente.
El citado medio apunta a que el Gobierno de Sánchez sospecha que a estas deficiencias subyacen motivaciones políticas para desgastar al mano único. Ni el Ejecutivo ni el Govern han comentado dicha información.
