Queda un mes para las elecciones autonómicas y municipales y la sombra de las generales aguarda en la distancia. Los comicios del próximo 28 de mayo no solo servirán para redefinir el panorama político en las administraciones locales sino que se dibujará la paleta que nos servirá para prever qué pasará en diciembre. Perder territorios como la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha o Extremadura podría ser fatal para Pedro Sánchez y sus intereses. También para Feijóo puede ser definitivo que sus barones demuestren debilidad electoral.

La incidencia de las elecciones municipales en un proceso a nivel nacional tiene mucha más importancia de la que se puede pensar. Y existe un reciente precedente que sirve para ejemplificar este fenómeno. En las elecciones andaluzas de 2022, Juanma Moreno Bonilla obtuvo una histórica mayoría absoluta que provocó el desalojo del PSOE tras 40 años de gobierno en la Junta de Andalucía. Esa victoria generó un terremoto en las encuestas. Antes de los comicios, Pedro Sánchez era líder absoluto en los estudios demoscópicos publicados. Tras conocerse los resultados y erigirse el PP como nuevo poder en Andalucía, Alberto Núñez Feijóo subió como la espuma. Y desde esa fecha, el líder gallego se ha mantenido en cabeza. Y, a pesar de no conseguir una victoria definitiva, Moreno Bonilla fue el artífice del liderazgo de su partido a nivel nacional. Por tanto, lo que salga del 28M también se estudiará en clave general. 

Y luego está Sumar. La marca de Yolanda Díaz ha caído como napalm en el espectro progresista y la guerra que mantiene con Podemos refleja la desunión en la izquierda. Un ejemplo más en una historia que está condenada a repetirse, una vez más. Por su parte, Díaz comienza a definir de forma material como serán sus políticas a desarrollar, más allá de escuchas, abrazos y biquiños. De esta manera, la ministra de Trabajo ha presentado las bases de su proyecto político y, entre ellas, destaca la herencia universal, con la que busca un pago de unos 20.000 euros a cada joven que cumpla 18 años para destinarlo a vivienda o cualquier otra necesidad y subvencionado por los grandes capitales.

Más allá de teorías electorales, la vida real nos lleva a otro sitio. Y en clave económica, España termina la semana con datos optimistas. El PIB ha crecido un 0,5% en un gran primer trimestre y recupera los valores prepandemia en la práctica; además, el IPC se estabiliza en el 4,1% y la inflación subyacente cae un punto por la ralentización del precio de los alimentos. Por otra parte, también sale reforzado el eje España-Portugal y podría decirse que la alianza ibérica sostiene el PIB de la eurozona, que crece un 0,1% en el primer trimestre. España es la economía que marca el mejor dato de progresión interanual de toda la eurozona, con un avance del PIB del 3,8% y Portugal aparece en primera posición con una expansión del 1,6% de su PIB. 

Teniendo en cuenta los hechos acontecidos durante la última semana y la irrupción de Sumar, las empresas demoscópicas continúan recabando datos sobre el momento actual que viven los partidos y sus posibilidades de cara a unas hipotéticas elecciones generales. Tras el análisis de los estudios emitidos durante la última semana por DYM, Electomanía y ElPlural.com y elaborar un promedio de todos sus datos, llega una nueva edición de la madre de todas las encuestas. 

Intención de voto

Tal y como se puede comprobar en el estudio demoscópico de ElPlural.com reflejado en el gráfico superior, Alberto Núñez Feijóo conseguiría ganar las elecciones en caso de producirse a día de hoy gracias al 30,1% de los votos. Cabe destacar que, respecto a los comicios de 2019, el PP mejoraría en 10 puntos el resultado obtenido por Pablo Casado. De esta manera, el líder gallego parte como favorito pero debería apoyarse en la ultraderecha. Vox es una condena para la formación de Génova ya que, para que Feijóo llegué a La Moncloa, es muy probable que necesite a Santiago Abascal.

En la encuesta de ElPlural.com, se puede comprobar cómo Vox se mantiene en unos muy buenos números. De hecho, a pesar de sus políticas basadas en la crispación y el populismo, Santiago Abascal conseguiría el 14,4% de los votos. Recordemos que en el 10 de noviembre de 2019, la ultraderecha consiguió un histórico 15,2%. Con un resultado similar, es verosímil ver a Vox en un futuro Consejo de Ministros. Y más aún al tener en cuenta la desunión que vive la izquierda.

En segunda posición estaría Pedro Sánchez gracias 25,5% de los votos. Un resultado no tan negativo teniendo en cuenta el sorpasso de Feijóo a raíz de las andaluzas ya que el gallego no consigue afianzar su liderazgo. Finalmente, el mayor problema radica en la pugna entre Sumar y Unidas Podemos. La formación de Díaz se haría con el 9,1% de los votos y la de Ione Belarra, con el 5,7%.