En el PSOE de León no queda ninguna persona que haya sido señalada por la trama Enredadera. Así lo ha confirmado este martes el propio partido al anunciar la renuncia de tres socialistas implicados en esta trama de corrupción.
Concretamente, han presentado su dimisión la alcaldesa de San Andrés del Rabanedo, María Eugenia Gancedo; y los concejales del mismo Ayuntamiento, Miguel Flórez y Santiago Blanco. Todos, han renunciado tanto a sus cargos municipales, como a los orgánicos.
Con ello, el PP se convierte en el único partido que sigue manteniendo entre sus filas a personas implicadas en mayor o menor medida en la trama Enredadera, un caso de corrupción política basado en la falsificación de datos de tráfico para la adjudicación de contratos de radares y semáforos a cambio de suculentas mordidas.
Entre otros, la principal persona del PP implicada en el caso Enredadera es el alcalde de León Antonio Silván. Según destapo ElPlural.com con la publicación de una serie de grabaciones, Silván filtraba información privilegiada relacionada con mesas de contratación al empresario José Luis UIibarri, ahora en prisión por este caso de corrupción y uno de los principales imputados en el caso Gürtel.
En otras palabras, gracias al alcalde del PP de León, el partido leonés estaba a las órdenes del primer constructor imputado en Gürtel.
Ciudadanos también dio el paso y forzó la dimisión de su primer alcalde detenido por un caso de corrupción: Carlos Ruipérez, regidor de Arroyomolinos.
Tiempo para preparar su defensa
En un comunicado, el PSOE de León asegura que la iniciativa de la dimisión de estos tres socialistas señalados en la Enredadera ha surgido de la propia formación.
¿El objetivo? “Que los tres ediles citados puedan centrar sus esfuerzos en la defensa de su inocencia y evitar cualquier derivación que, aunque ajena al propio proceso judicial, pueda ser utilizada en perjuicio del municipio de San Andrés del Rabanedo y del PSOE”.
Por ello, los socialistas de León quieren dar las gracias a estos tres presuntos implicados por dar el paso y demostrar “altura ética” y “coherencia”. Sin olvidar “los años de trabajo” dedicados al partido y a la ciudadanía, ayudando a “revertir una situación económica sumamente crítica”.
