El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha realizado este lunes su tradicional balance sobre el año político que acaba y los retos que devienen del corto y medio plazo. Una comparecencia de cerca de hora y media de duración, donde el líder del Ejecutivo ha tenido tiempo para presumir de gestión frente al “tornado de crispación y bulos de la derecha”, tanto política como mediática, y para responder a preguntas complicadas sobre el frente judicial al que ha tenido que hacer frente Moncloa desde que arrancase a legislatura.

Un sinfín de juicios pendientes de resolución que han marcado la actualidad política, con causas tan dispares como la instruida por el juez Juan Carlos Peinado contra la mujer del propio presidente Sánchez, Begoña Gómez; contra su hermano, David Sánchez Pérez-Castejón; contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, imputado por la presunta filtración de la confesión por fraude fiscal de Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; y contra la pareja conformada por José Luis Ábalos y Koldo García Izaguirre, otrora ministro de Transportes y su escolta personal.

Especialmente directas han sido las preguntas sobre dos de los frentes: el de Begoña Gómez, con el polémico Peinado al frente de una bizarra instrucción que el propio Sánchez demandó por haberse ejercido de forma prevaricadora, y el del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz: “Hay que contestar de dos formas. Por un lado desde el plano judicial, donde lo único que tengo que decir es que el tiempo pondrá las cosas en su sitio. Absoluta tranquilidad y confianza”, ha indicado.

Más dilatadas han sido sus respuestas hablando sobre el aprovechamiento político de estas instrucciones: “Estamos ante una operación de una oposición que ha renunciado a plantear un proyecto político ilusionante, que está en la confrontación y en intentar ganar con bulos lo que los votos no le dieron. No nos deben despistar de nuestro objetivo, que no es otro que seguir creciendo”, ha indicado en primera instancia.

Repreguntado sobre sus palabras protegiendo al fiscal general del Estado, a quien siempre ha considerado inocente de los hechos imputados por el novio de Ayuso, Sánchez ha vuelto a dejar claro que confía en la inocencia del líder del Ministerio Público: “Antes del informe de la UCO ya manifesté la confianza del Gobierno con el fiscal general del Estado. Una vez visto el informe del cuerpo de la Guardia Civil, aún más. No deja de ser curioso que algunos partidos utilicen los informes de la UCO como los 10 mandamientos cuando les vienen bien, pero cuando no dicen lo que les interesa señalan que no son tan importantes”.  

“Deberían ser algo más coherentes a la hora de sustentar sus críticas”, ha proseguido. Pero no se ha quedado ahí, recordando el origen de la investigación contra García Ortiz y reclamando las explicaciones de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. “Es paradójico que se hable de esto cuando la pareja de la señora Ayuso aún no ha explicado su delito fiscal y la presidenta de la Comunidad de Madrid no ha dado explicaciones. El señor Feijóo, teniendo en cuenta lo que le pasó a Casado, no se las pedirá”, ha sentenciado.