La guerra de comisiones de investigación abierta desde el principiod de la legislatura ha acabado con la de la Asamblea de Madrid citando a declarar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. El anuncio de su citación, junto a la de su mujer, Begoña Gómez, encausada por la comisión de los presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios, no sentó nada bien en el Palacio de La Moncloa.

De hecho, fuentes del Gobierno recuerdan que no existe obligación alguna de ir a este tipo de citaciones, tal y como dictamina la propia ley y como ha venido sucediendo con anterioridad en la tradición frente a la investigación de nuestro país. Este es el argumento oficial, claro está, pero es que además existe la sensación de que este último movimiento madrileño no es más que un jaque más de una partida que amenaza con convertirse en imperecedera, con reproches cruzados y los tribunales como protagonistas tanto en el caso de Begoña Gómez, investigada por el polémico juez Peinado en una instrucción no exenta de polémica y en la que el presidente del Gobierno prestó declaración, como en el Alberto González Amador, pareja sentimental de la presidenta del PP y defraudador confeso por sus negocios como intermediario en la compra de material sanitario.

Estos reproches, de hecho, han sido la excusa utilizada por la propia Ayuso para no acudir este viernes al Palacio de La Moncloa en el marco de la ronda de contactos con los presidentes autonómicos emprendida hace algo más de un mes por Pedro Sánchez. De esta forma, la baronesa popular se ha convertido en la única mandataria regional en rechazar este encuentro bilateral, yendo, además, en contra de lo estipulado por el líder de su partido y abriendo una nueva brecha con el organigrama de Génova, 13.

Con este panorama como telón de fondo, quien ahora rechaza acudir a la citación, en este caso de la comisión sobre la Universidad Complutense de la Asamblea de Madrid, es el presidente del Gobierno. Fuentes de Moncloa son claras al respecto: “No se trata de la primera convocatoria a un miembro del Gobierno de España por parte de un Parlamento autonómico. Ya se habían producido antes, con Mariano Rajoy en el Parlament de Cataluña, por ejemplo. Y los miembros del Gobierno de España nunca acudieron a tales convocatorias por no tener obligación legal”.

“Varios dictámenes del Consejo de Estado eximen a los miembros del Gobierno de España de comparecer en las Comisiones de Investigación creadas por las Asambleas de las Comunidades Autónomas”, prosiguen estas mismas voces. “Con esta iniciativa, que sabe destinada al fracaso, Isabel Díaz Ayuso pretende dejar en evidencia una vez más a Núñez Feijóo como un líder de la oposición al Gobierno de España incompetente e ineficaz”, sentencian.

La izquierda también utiliza la comisión

En el vaivén de citaciones para esta comisión de investigación, promovida por la propia Ayuso en respuesta a la del Congreso de los Diputados, la izquierda está utilizando sus posibilidades internas para poner en aprietos al PP madrileño. Como el objeto de este marco es la Universidad Complutense de Madrid, los más rápidos en disparar fueron los de Manuela Bergerot. Más Madrid, concretamente, aprovechó la comisión popular para citar a declarar a personalidades como Esperanza Aguirre, Cristina Cifuentes y Pablo Casado

Algo parecido ha hecho el PSOE de Juan Lobato, quienes, este mismo martes, casi al mismo tiempo que se conocía que el PP citaba al presidente del Gobierno y a su mujer, hacía lo propio con Isabel Díaz Ayuso y su jefe de Gabinete, Miguel Ángel Rodríguez. La primera lo hace en condición de alumna ilustre de la Complutense, reconocimiento que recibió en enero de 2023.