El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presentado este miércoles la Fundación Avanza, el nuevo think tank del PSOE para presentar batalla al neoliberalismo y la extrema derecha también en el ámbito de las ideas. Este “laboratorio de ideas”, ha preferido calificar el secretario general de los socialistas, es ahora “más necesario que nunca” para situarse “frente a esos tanques de pensamiento cerrados, que alimentan opiniones prefijadas”. Una idea clara ha guiado su discurso: ganar, los debates y los procesos electorales, es la única opción de la izquierda para plantar cara al poder imperante.

“Siempre he tenido claro que no nos basta con tener razón, hay que ganar para convertir esa razón en políticas públicas que mejoren la vida de la gente”, ha confesado el jefe del Ejecutivo, mostrándose seguro de que “la mejor manera de combatir a la ultraderecha es Gobernar”. “La realidad se cambia desde el poder”, ha proseguido, señalando que “quienes critican esta ambición son los que no necesitan los votos para cambiar esta realidad, porque lo hacen con el poder del dinero”. “Esta es la gran diferencia entre ellos y nosotros”, ha sentenciado.

Sánchez ha defendido el inicio de los trabajos de Avanza para contrarrestar lo que consideran una infrarrepresentación de las ideas progresistas en los medios de comunicación y en el conjunto de la opinión pública. “Es un espacio abierto a todas las propuestas progresistas, a quienes deseen aportar algo en beneficio a esas ideas, para pensar y repensar algunas de nuestras certezas y preguntarnos si estamos aplicando bien los principios de los que nos sentimos orgullosos”, ha desgranado durante su intervención en la puesta de largo del think tank.

El presidente del Gobierno también ha querido mirar dentro de su espectro político, reconociendo los problemas de las fuerzas socialdemócratas para contrarrestar a las opciones reaccionarias que ganan peso en todo el mundo. “No tenemos las recetas para hacer frente a las mentiras tan impúdicas de la extrema derecha”, ha confesado, apuntando que la respuesta a estos planteamientos ultras debe ser “fiel a la vocación internacionalista de la izquierda” y partir del “conocimiento científico, la acción política, la academia y los responsables de tomar las decisiones”.

Contra la “respuesta neoliberal” a la crisis y la “internacional ultra”

Sánchez ha defendido la respuesta dada por el Gobierno de coalición a las crisis que han golpeado a occidente, la Covid y la guerra de Ucrania, y su traslación a las instituciones europeas. En comparación ha querido acordarse de la reacción a la crisis financiera que machacó Europa y a sus ciudadanos la década pasada. “El mundo tardó mucho tiempo, por culpa del naufragio del neoliberalismo, en superar la crisis financiera”, ha recordado, cargando contra aquellos que hablaron de “refundar el capitalismo” y luego olvidaron sus palabras.

Los causantes de aquel desastre ni pidieron perdón ni hicieron propósito de enmienda. Mantuvieron su ideario de exaltación de la codicia, desregulación de los mercados, y reducción del Estado del Bienestar como si nada hubiera pasado”, ha criticado. No obstante, el máximo mandatario de los del puño y la rosa se mostrado seguro de que “hoy podemos desmentir con datos todos los mantras de la respuesta neoliberal a la crisis financiera”. Una vez confrontadas las ideas neoliberales, le ha tocado el turno a la extrema derecha.

Sánchez se ha mostrado “en contra de lo que defienden los profetas del anarcocapitalismo y sus seguidores españoles”, defendiendo la justicia social como “una condición indispensable para un crecimiento económico sostenido y sostenible”. A su juicio, el modelo español es el ejemplo claro de que las políticas progresistas son el camino correcto, tanto para las personas como para la economía, razón que le ha llevado a considerar que es esto y no la casualidad lo que empuja a “la internacional ultraderechista” a celebrar cumbres en España.

“Ponen al Gobierno de coalición progresista en el punto de mira de sus ataques porque para ellos el éxito de las políticas progresistas españolas es la gran amenaza. Porque estamos demostrando con hechos que todo lo que ellos defienden no son sino bulos, desinformación y una clara intencionalidad de confundir a la gente”, ha trasladado. Avanza nace como respuesta a esto, ha ensalzado, para abordar desafíos como “vencer el escepticismo de quienes dudan de la capacidad de las instituciones democráticas para vencer la presión de los poderosos o el malestar difuso de las clases medias y trabajadoras”.

Adaptarse al momento histórico no significa renunciar a nada, sino mantener nuestra apuesta por la libertad, la igualdad y la fraternidad; defender el papel de lo público para combatir las desigualdades y sustentar nuestro compromiso con la equidad y la eficiencia”, ha concluido.