El jugador del F.C. Barcelona, Lionel Messi / EFE-Archivo El jugador del F.C. Barcelona, Lionel Messi / EFE-Archivo



La prensa derechista esta encantada por las acusaciones contra Messi. Hoy, el subdirector de Información de La Razón, Pedro Narváez, carga contra el argentino, no queda muy claro si por su presunto defalco al fisco o por el hecho de jugar en el Barça y “hablar catalán”.

Nadie le llama sinvergüenza
Por otra parte, Narváez se muestra en su artículo casi molesto del maltrato a los políticos corruptos. “Messi nos da una idea de lo barata que está la carne de político -escribe- y “la prueba es que nadie en público le llama sinvergüenza, como ya le habrían gritado si en vez de en el banquillo estuviera en la bancada. Al cabo, su presunto delito es más de lo mismo. Por menos de lo que la Fiscalía dice que ha defraudado, a un alcalde lo empalan al estilo Vlad III, más conocido como Drácula”.

Aprendió rápido las costumbres de los de la senyera
Para el subdirector de La Razón, el delito de Messi es, además de ocultar dinero al fisco, haber “aprendido rápido las costumbres de las élites que lo encumbraron como el dios de la nueva patria que posa con la camiseta de la senyera”, y hablar “catalán en la intimidad”, lo que es, según el columnista, “como si uno supiera ruso y en una cumbre con Putin sólo lo utilizara para hacer pis”.

Messi y el clan Pujol, la misma familia
Y mira por dónde, el presunto delito de Messi está vinculado con las tropelías que se le atribuyen a los hijos de Jordi Pujol. “Pujol padre asegura que sus hijos tienen su propia vida y Messi hijo no sabe qué hizo su padre con tanto dinero”. Y es que “los que toman los colores del Barça como la bandera de su delirio –afirma Narváez- “optaron ayer por un silencio de hospital. Cosas de familia”.

“El astro tendrá que pasar ahora la ITV de la moralidad y entrenar para parecer un chico honesto además de un genio, que es donde le saca cuatro penaltis a Oriol Pujol”, concluye el artículo en La Razón.