El séptimo debate electoral 'cara a cara' de la democracia no ha dejado indiferente a nadie. Era la gran oportunidad de escuchar a Feijóo explicar qué quiere hacer con España, pero no ha habido suerte. A una semana de las elecciones, seguimos sin conocer su programa electoral. Lo que sí sabemos es que el líder del PP es capaz de mentir para ser presidente del Gobierno. En las dos horas que duró el debate no paramos de escucharle mentira tras mentira.

Los españoles y españolas merecían un debate, un debate serio y riguroso donde los dos grandes partidos con opciones reales de poder gobernar España, el PSOE y el PP, pudiesen exponer sus propuestas concretas y sus modelos de país para los próximos cuatro años. Pero Feijóo siempre tuvo claro que no iría a eso. Eligió para preparar el debate a Miguel Ángel Rodríguez, inventor del trumpismo antes que Trump. Su objetivo era enfangar el debate con falsedades y no dejar hablar al presidente, y eso fue lo que hizo.

Vamos por partes, el presidente Pedro Sánchez había pedido varios debates a Feijóo, en medios escritos, en las televisiones públicas y privadas, pero el líder del PP dijo que no, que como mucho uno, y por supuesto con una condición, solo lo haría en terreno propio, en una televisión privada de derechas. Aún así, Pedro Sánchez aceptó.

El presidente socialista demostrando el máximo respeto a los españoles, preparó durante varios días ese debate para dar cuenta pormenorizada de su gestión con rigor y seriedad. Había numerosas razones para sacar pecho de esta legislatura. España tiene los mejores datos de empleo en la historia, crece el doble que Europa y se ha fortalecido el Estado del Bienestar más que nunca. Y todo ello a pesar de la pandemia, de una guerra y de un PP tirado al monte, cuyo único objetivo ha sido tratar de hundir nuestro país en los últimos cuatro años.

Feijóo, por el contrario, apenas dedicó un rato a preparar el debate. Algo que daba que pensar, puesto que en todos los debates del Senado, el líder del PP tenía que leerlo todo, e incluso leyéndolo se equivocaba y patinaba. Luego entendimos por qué.

Entendimos el porqué nada más comenzar a hablar Feijóo. Él no iba a explicar su proyecto, porque no lo tiene, y si lo tiene, no lo dice para que los españoles no se asusten. Su guion se limitaba a seguir hablando de ETA, falsear datos, contar medias verdades y mentiras completas. Pero, y ¿alguien que aspira a gobernar nuestro país puede engañar a los españoles y españolas sin despeinarse?

Esta vez no era insolvencia, esta vez el líder del PP actuó con auténtica mala fe. O quizás, tuvo que utilizar la mentira como único argumento ante su falta de solvencia. Comenzó asegurando que tanto Rajoy como Aznar crearon más empleo que Pedro Sánchez. Rotundamente falso. Hoy España está en cifras récord de empleo, con casi 21 millones de personas trabajado, donde uno de cada dos nuevos empleos son indefinidos y con el paro más bajo en 15 años. Y según las estadísticas oficiales, el Gobierno de Pedro Sánchez ha creado 300.000 empleos más que Rajoy. ¡Feijóo miente!

Feijóo dijo que hay 43.000 autónomos menos que en 2019. Falso. Las estadísticas oficiales indican que en esta legislatura los autónomos ha crecido en 77.823 personas. Aseguró que estábamos a la cola de crecimiento europeo. Falso. Todos los organismos económicos internacionales, incluso la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, aseguran que España es el motor económico de Europa. También el líder del PP afirmó que España tenía la inflación disparada. Falso. Ya está por debajo del 2%. La más baja de la Unión Europea. ¡Feijóo miente!

Feijóo aseguró que el PP votó a favor de subir las pensiones. Falso. Señor Feijóo, yo estaba allí, en el Senado, el día de la votación y lo vi votar en contra de que las pensiones subieran un 8,5%. ¿Por qué miente? El líder del PP dijo también que no se había construido ninguna vivienda de alquiler asequible esta legislatura. Falso. Se han movilizado 66.000. Aseguró además que la “okupación” de vivienda se había disparado. Falso. Las condenas por usurpación han bajado un 20%. De 6.000 han pasado a 4.300 y las condenas por allanamiento han descendido de 285 a 230. Ni la “okupación” se está disparando ni es el problema masivo que se ha dibujado. ¡Feijóo miente!

En materia energética dijo dos falsedades: que la solución ibérica la iba a derogar la Unión Europea. Falso. Se ha ampliado hasta diciembre de 2023. Y la segunda, que el precio de la energía en España es un 40% más caro que en Europa. Falso. Es la misma que en Alemania y menor que Francia o Italia. ¡Feijóo miente!

Feijóo volvió a hablar de ETA para evitar hacerlo de los recortes de derechos y libertades que está llevando a cabo el PP, como la prohibición de banderas LGTBI y de las concentraciones contra la violencia machista, allí donde gobierna con Vox. También el líder del PP pidió dejar gobernar al partido más votado, justo lo que él no hace: Ayuso fue presidenta de Madrid sin ser la más votada, Almeida fue alcalde de Madrid sin ser el más votado, Moreno Bonilla fue presidente de Andalucía sin ser el más votado, Mañueco fue presidente de Castilla y León sin ser el más votado y ahora en Extremadura gobernará el PP sin ser la lista más votada. ¡Feijóo miente!

Feijóo de lo que no quiso hablar fue del sobresueldo que cobra del PP, además del sueldo que recibe como senador. Por un trabajo cobra dos sueldos. Y aunque habló mucho de Galicia evitó hablar de su relación con su “presunto amigo íntimo” el narco.

El PP a lo largo de la historia de la democracia ha mentido y mucho a los españoles. Rajoy nos engañó sobre el espionaje a Bárcenas, la caja B del PP o los “hilillos de plastilina del Prestige”. Aznar nos mintió sobre las armas de destrucción masiva en Irak para justificar una guerra ilegal e inmoral y sobre que el 11-M fue cosa de ETA. Pero, visto lo visto hasta ahora, Feijóo está dispuesto a superar a ambos. Fue cómplice de las mentiras de sus antecesores porque él siempre estuvo ahí, agazapado en la sombra y parece que tomó buena nota. La prueba son, nuevamente, las mentiras y los sobresueldos.

Feijóo terminó su última intervención diciendo que será un presidente de fiar y que no le iba a mentir a los españoles. Fue la última gran mentira en el debate de alguien que está dispuesto a todo para conseguir el poder. ¿De verdad alguien así es lo mejor para gobernar nuestro país?