Todavía arrecia las críticas a la ministra de Educación Isabel Celaá por viajar, horas antes del confinamiento de la capital de España,  desde Madrid a su residencia de Bilbao por motivos médicos y amparados además en que es su lugar de residencia. La ministra volvió posteriormente para estar presente en los actos del 12 de Octubre. Sin embargo Las críticas especialmente desde la derecha y la caverna mediática se han cebado en ella alegando que no ha respetado el confinamiento a pesar de que los dos motivos del viaje, razones sanitarias y lugar de residencia, están incluidos en la norma que lo justificarían.

Pero cuando aún se oyen esos ecos de la derecha nos enteramos que la ex portavoz parlamentaria del PP y diputada del Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, ha cruzado España durante el puente y en algún caso por motivos simplemente festivos. La diputada del PP ha sido entrevistada este lunes en un programa de la televisión pública andaluza. Lo más llamativo es que lo hacía desde Córdoba en el entorno de la Mezquita y el Puente Romano, una zona plagada hoy de turistas como se puede apreciar en el vídeo en este festivo del 12 de Octubre.

Al ser preguntada si estaba allí “por placer o visitar los patios”, ha dicho que era por “muchas cosas”. Y en una Córdoba festiva, de patios y con una importante corrida de toros, Cayetana lanza toda una perorata filosófica política para justificar que iba a los toros y de puente como otros tantos miles de turistas.

He aquí el larguísimo circunloquio que improvisa para justificar su escapada al Sur: “Vengo de Barcelona de un acto bajo la estatua de Colón que algunos vándalos revisionistas quieren tumbar y por defensa del constitucionalismo que tiene mucho que ver también con Córdoba… ¿Y por qué digo esto de Córdoba? He querido venir a Córdoba por muchos motivos, en fin, para compartir un día también aquí con las personas del partido, mis compañeros y esta tarde para ir a los toros, una fiesta nacional también objeto fóbico de todos los españoles pero sobre todo porque Córdoba tiene un sentido político y un valor simbólico en día de la Fiesta nacional. Córdoba es integración de los distintos, sinónimo de culturas que opinaban de manera diferente dentro de una ciudad común y ese espíritu cordobés queda perfectamente plasmado en la Constitución del 78… que es lo que tenemos que fortalecer ahora para una mayoría racional, amplia y ancha con personas diferentes pero que comparten una voluntad de común de seguir siendo libres e iguales porque ese empeño común está siendo atacado y acosado a partir de fuerzas reaccionarias y populistas e incomprensiblemente por parte del propio Gobierno". [Vea el vídeo de las declaraciones de Álvarez de Toledo en este enlace, a partir del minuto 55:15].