Un usuario de Twitter ha preguntado a Macarena Olona si concurrirá o no a las elecciones generales del próximo 23 de julio y la respuesta de la que fuera candidata a los últimos comicios andaluces ha dado mucho de qué hablar. No ha dicho que sí, pero tampoco lo ha negado de forma tajante.

Concretamente, este ha sido en enigmático mensaje que ha dejado en redes sociales: “Dije que no concurriría a las elecciones autonómicas y municipales. Nadie podría atribuirme un batacazo electoral por debajo del 8%. Cumplido”.

Olona ha hecho así alusión de forma indirecta a lugares donde la izquierda ha perdido la gobernabilidad en parte debido al batacazo de Podemos, que no ha entrado en autonomías decisivas como la Comunidad de Madrid  o la Valenciana. El caso de la primera región ha derivado en última instancia en que Isabel Díaz Ayuso logre la mayoría absoluta al no conseguir los morados rebasar el 5% de porcentaje de voto y mantener sus escaños. En el área mediterránea el hecho ha impedido la posibilidad de revalidar el conocido como Pacto del Botànic. En definitiva, la izquierda a la izquierda del PSOE solo ha mejorado resultados en La Rioja, Murcia y Extremadura.

¿Qué quiere decir Olona?

A decir verdad, nadie lo sabe. Así lo reflejan de hecho los comentarios en redes sociales. En cualquier caso, el mensaje resulta enigmático a todas luces. Por el momento, lo que sí podemos contar son los pasos que diera la ex de Vox desde que saliera del partido. El motivo principal de que Olona se fuera de la formación pasaba por unos resultados lejos de lo esperado para Vox que, si bien celebrados dentro del partido, implicaron que Juanma Moreno Bonilla pudiera gobernar con la tan ansiada mayoría absoluta.

Después, Olona ha hecho gala de una postura que gira hacia una posición menos radical de la que exhibe Vox. De hecho, la que fuera candidata a la Junta denunció que el partido había rebasado cualquier línea roja contra su persona, lanzándola todo tipo de insultos, exabruptos y amenazas. Este fue la gota que colmó el vaso y lo que motivó en última instancia a la protagonista de estas líneas a contar los hechos ante los medios de comunicación.

De ahí en adelante puso en funcionamiento su nuevo proyecto, la Fundación Igualdad Iberoamericana, así como una iniciativa Legislativa Popular (ILP) de modificación de la Ley contra la Violencia de Género para la que se propone recoger 50.000 firmas en toda España. A ella se han sumado voces que estaban en el partido, siendo el último ejemplo Antonio de Miguel.

El portavoz de la extrema derecha en el Ayuntamiento de Guadalajara fue también el impulsor del polémico pin parental y es ahora encargado de lanzar el proyecto de Olona en la provincia tras alegar la semana pasada que se sentía “muy decepcionado y traicionado con las prácticas mafiosas y el irreconocible rumbo que ha tomado el partido en los últimos años, todo ello permitido por Santiago Abascal”, a quien apuntan también desde otros puntos de España como Valencia.

Vox en el 28M

Este 28M Vox ha logrado un importante avance respecto a las últimas elecciones de 2019 y ha conseguido entrar en todos los parlamentos autonómicos. Un imagen que choca directamente con la de la izquierda a la izquierda del PSOE, que ha perdido autonomías que, eso sí, quizá habría obtenido en el caso de confluir unida, como analizaba ElPlural.com.

Así las cosas, la ultraderecha se ha convertido en clave para pactar con el PP en algunas de las comunidades más codiciadas como la Comunidad Valenciana o Aragón, mientras que entra por primera vez en los parlamentos navarros, canarios, extremeño y riojano.

En el ámbito municipal, pasa de ser quinta a tercera fuerza con 1,5 millones de votos, doblando con ello el porcentaje de voto -que pasa del 3,5% al 7%- y triplicando sus concejales, de 500 a más de 1.700. Asimismo, podría acabar facilitando el gobierno municipal a los populares en Valencia, Sevilla o Zaragoza, mientras que se torna decisivo en aproximadamente una veintena de capitales de provincia y en Baleares, Murcia, Cantabria y Extremadura.