El vicepresidente segundo y líder de Podemos, Pablo Iglesias, y la ministra de Igualdad, Irene Montero, disfrutaban de unas vacaciones en la localidad de Lena (Asturias) cuando de repente se vieron truncadas por varias pintadas y presiones en su contra. Unos hechos que han hecho a la familia abandonar la zona asturiana.

Según La Nueva España, Iglesias y Montero se hospedaban en la casa del diputado y secretario general del PCE, Enrique Santiago. Unas estancia dura y rápida.

Durante los últimos días, han aparecido unas pintadas con el texto “coletas rata” en una carretera cercana.

Un restaurante de la zona, Casa María, se vio envuelto en esta polémica, puesto que muchas personas empezaron a lanzar comentarios ofensivos por la presencia de los políticos en la mesa. Ante esto, la dueña del local tuvo que publicar en su cuenta de Facebook la desvinculación total de cualquier ideología en su restaurante. “En segundo lugar,que nuestra “casa” se desvincula totalmente de cualquier inclinación ideológica,siendo el respeto y la educación ,lo único que prima entre nosotros. Una vez esperamos, aclarado el tema, animar a todos y todas los que están intentando boicotear nuestro local,cesen en su empeño y vengan a comprobar por ellos mismos que nuestra cocina sigue abierta para todo aquel que quiera disfrutar de ella.Y que por supuesto, en caso contrario,adoptaremos las medidas oportunas. Un saludo y feliz domingo para todos y todas!!!”, compartía. Asimismo, añadía que le parecía “indignante y vergonzoso” lo ocurrido.

Ante esta situación, varios usuarios de Twitter apoyaron a la pareja y criticaron el acoso recibido. Uno de los más tajantes fue Ismael Serrano, cantautor español, que considera que “esto es intolerable. No. No es un escrache. Es puro fascismo”.