Henar Álvarez ha sido objeto de duras críticas en Badajoz y, ahora, podría ser declarada persona ‘non grata’ en la ciudad extremeña.

Este posicionamiento viene por lo sucedido la semana pasada en la Fiesta de Los Palomos, en la cual se reivindican los derechos del colectivo LGTBI, y que tiene su origen en las palabras que el difunto alcalde de la ciudad, Miguel Celdrán, tuvo con los homosexuales en una entrevista radiofónica, a quienes se refirió como “palomos”.

Sobre este hecho quiso bromear la presentadora de Buenismo Bien: “Badajoz es ya mi sitio favorito. Os lo juro. Me flipa que os insulte un alcalde homófobo y hayáis montado una fiesta que dura ya 11 años para que se joda. Estará pensando: ya me podía haber metido la lengua por el culo”. Unas palabras que le han costado caras y por las que podría tener consecuencias.

 

Ante estas, el exconcejal de Vox del Ayuntamiento de Badajoz, Alejandro Vélez, ha registrado una moción en la que se podrá declarar persona 'non grata' a Álvarez, aunque habrá que esperar a los resultados de la votación del próximo pleno para averiguarlo.

Además de la moción, Vélez, que reclamó una “rectificación pública” a la actriz, también solicita al Consistorio presentar una querella criminal contra ella “por difamar y humillar” a la ciudad y al alcalde “promotor de la fiesta”, además de a los pacenses, quienes le han pagado para “contar chistes, no difamar”.

Celdrán y ‘los palomos’

Miguel Celdrán concedió una entrevista al programa La mañana de Buruaga (Cadena Cope) en 2011, en la que fue preguntado por su afición a la cría de palomos: “Se crían ellos solos. Intento inculcar esto en mis nietos”.

Acto seguido, se introdujo la expresión “palomos cojos”, la cual está directamente relacionada con el colectivo LGBTI. “En Extremadura hay pocos. Aquí normalmente los echamos para otro lado. Gracias a Dios, estamos todos muy sanos. Esta tierra es sana”, afirmó al respecto, aunque la polémica ya estaba servida y las críticas no tardaron en llegar.

Desde El Intermedio, su presentador, El Gran Wyoming, propuso inaugurar una “caravana de palomos” que comenzase en Madrid y viajase hasta Badajoz, dando pie así a la creación de la fiesta hoy conocida como Los Palomos.