La mañana de este martes ha estado marcada por una buena noticia en el terreno económico, la publicación del IPC de octubre (indicador que mide la inflación) se desploma hasta el 7,3%, anotando la mayor caída desde la entrada de España en el euro. Sin embargo, lo que a priori resulta una buena noticia, parece que no todos lo reciben con agrado como es el caso de la televisiva Ana Rosa Quintana.

La reconocida presentadora ha recibido en directo el positivo dato visiblemente molesta y ha indicado que habrá que esperar a conocer otros datos para analizar la situación económica, restando importancia a la senda de descenso que está tomando la inflación, derivada de la labor del Ejecutivo.

“Se está doblegando la curva de los precios. Desde el máximo del IPC registrado en julio (10,8%), la inflación se ha reducido un tercio, gracias a medidas como el mecanismo ibérico, la bonificación del transporte público o la rebaja de los impuestos en la factura del gas y de la luz, así como la bajada de los precios de la energía en los mercados internacionales”, aseguran fuentes ministeriales

Es más, con la confirmación del IPC, España se sitúa a la cola de Europa, junto a Francia, en cuanto a inflación se refiere. Asimismo, los expertos prevén sucesivas caídas durante el próximo año.

La reacción de la presentadora -cuyo programa sigue una línea editorial opuesta a la del Ejecutivo- a la noticia ha sido muy comentada en las redes sociales. De esta forma, los twitteros se han hecho eco de la cara de la periodista al conocer los nuevos datos de inflación.

Asimismo, muchos espectadores han criticado a la presentadora por “poner el grito en el cielo” a causa de la inflación y ahora que los datos mejoran, su programa prefiere no hacerse eco.