El Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) es la herramienta pactada entre el Gobierno de coalición y los sindicatos -pero no con la patronal- para asegurar la viabilidad futura del sistema público de pensiones. Un mecanismo que sustituye al factor de sostenibilidad del Partido Popular de Mariano Rajoy y que ha entrado en vigor finalmente este 1 de enero de 2023, tal y como estaba previsto. La herramienta está diseñada para mantenerse hasta 2032, es decir, durante la próxima década. Estas son las cuestiones básicas a tener en cuenta en los primeros días de aplicación del MEI en la nómina de los trabajadores. 

¿Afecta la entrada en vigor del MEI a la nómina?

El Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) nace con una manera de aportar financiación al Fondo de Reserva de la Seguridad Social, conocida públicamente como la hucha de las pensiones, de forma conjunta. Es más, fuentes del Gobierno lo explican como una forma de "repartir de un modo equilibrado entre generaciones el esfuerzo para reforzar el sistema".

Es decir, trabajadores y empresarios deben contribuir a llenar la hucha de las pensiones para, en el momento de su jubilación, poder contar con una cantidad de dinero suficiente que permita mantener el poder adquisitivo, y por ende disfrutar, de los últimos años de vida. Con esta explicación, la respuesta es clara: sí, las nóminas desde el 1 de enero de 2023 contribuyen al MEI para volver a llenar la hucha de las pensiones.

¿Cuánto paga la empresa y cuánto el trabajador?

Gobierno y sindicatos pactaron en la primera gran pata de la reforma de pensiones incluir una aportación del 0,6% de la cotización por contingencias comunes, un porcentaje repartido entre la empresa y el trabajador, con la misma distribución que el resto de cotizaciones sociales. Del 0,6% total que va al Fondo de Reserva de la Seguridad Social, el 0,5% principal corresponde a la aportación de la empresa mientras que solo el 0,1% restante será pagado por el trabajador a la hucha de las pensiones. En el caso de las nóminas de los autónomos, la cotización varía.

Un ejemplo práctico. Si un trabajador cuenta con una base de cotización en la nómina de 1.000 euros, 6 de esos euros van, desde el 1 de enero, a la hucha de las pensiones. Del total, 5 euros corren a cargo de la empresa y 1 euro del trabajador. 

La hucha de las pensiones se vuelve a llenar

El MEI nace con el objetivo de asegurar la viabilidad futura del sistema público de pensiones ante la jubilación en el futuro más próximo de la generación del baby boom. En apenas una década, la generación más numerosa a nivel nacional pasará de ser trabajadora a pensionista, poniendo en peligro la sostenibilidad del sistema. Para ello, Gobierno y agentes sociales llevan meses negociando medidas que eviten continuar el vaciado constante de la hucha de las pensiones. Y parece que, de momento, lo han conseguido.

La hucha de las pensiones ha comenzado a llenarse por primera vez después de 13 años de vaciado. Una realidad que ya anunció orgullosa la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en la aprobación del anteproyecto de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) en Consejo de Ministros. “Por primera vez en trece años el Gobierno realizará una aportación al fondo de reserva de las pensiones”, anunciaba Montero lo que se puede entender como un cambio de tendencia en el sistema de pensiones y en su viabilidad.

No obstante, el rellenado de la hucha de las pensiones corresponde al comportamiento del sistema de la Seguridad Social y a los cambios pactados entre los agentes sociales y el Ministerio de Seguridad Social y no a la reducción del número de pensionistas, como queda probado con las cifras de la Seguridad Social. 

La primera inyección del MEI a la hucha de las pensiones: 2.957 millones 

La primera inyección a la hucha de las pensiones procedentes del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) será de 2.957 millones de euros para este 2023. Una cifra que ya anunció la ministra de Hacienda y que, por primera vez, da la vuelta a la línea descendente del gráfico del Fondo de Reserva de la Seguridad Social. La entrada de casi 3.000 millones de euros supondría aumentar la reserva destinada al pago de pensiones hasta aproximadamente los 5.000 millones de euros, una cifra que no se ve desde 2018, como revelan los últimos datos del Ministerio de Seguridad Social. 

Gráfico del Fondo de Reserva de la Seguridad Social. Fuente Ministerio de Seguridad Social

¿Qué pasará en el futuro?

El MEI cuenta con dos componentes bien diferenciados, como han explicado desde el Ministerio de Seguridad Social. El primero pasa por la reactivación del Fondo de Reserva de la Seguridad Social a través de una aportación finalista de trabajadores y empresarios entre 2023 y 2032. La segunda fase comenzará en 2032, de mantenerse vigente el mecanismo, con detalles aún desconocidos y pendientes de negociación entre el Gobierno y los agentes sociales.  

Las previsiones de unos y otros sobre la sostenibilidad futura del sistema no llegan a coincidir. Lo recomendable ahora es esperar a la evolución de la hucha de las pensiones este primer año, con los 2.957 millones de euros nuevos, para comprobar si las aportaciones del MEI funcionan y, finalmente, la hucha de las pensiones comienza a llenarse. Solo así el sistema estará preparado para la jubilación de los baby boomers. No obstante, en caso de un cambio de Gobierno en las próximas elecciones, el MEI correría el riesgo de desaparecer del sistema -como lo ha hecho el factor de sostenibilidad del PP- y volver a la tendencia anterior.