La semana de revisiones al alza y buenas noticias económicas se cierra este viernes con la publicación de dos estadísticas clave. La inflación ha caído ocho décimas en septiembre, hasta situarse en el 1,5%, la cifra más baja registrada desde el mes de marzo de 2021. Asimismo, el Producto Interior Bruto (PIB) ha certificado su crecimiento del 0,8% durante el segundo trimestre y el incremento de seis décimas en su progresión interanual, alcanzado un 3,1% después de la revisión al alza del primer trimestre, hasta el 0,9%.
El Índice de Precios de Consumo (IPC) ha cerrado el noveno mes del año con su dato más bajo en los últimos tres años y medio, volviendo a situarse por debajo del objetivo del 2% exigido por el Banco Central Europeo (BCE). El Instituto Nacional de Estadística (INE) atribuye esta reducción al descenso de los precios de los carburantes, los alimentos y la electricidad, que han permitido que en septiembre se haya producido el mayor descenso en la tasa de inflación del último año.
Simultáneamente, la inflación subyacente -aquella que no incluye los alimentos no elaborados ni la energía- también ha retrocedido, hasta situarse en el 2,4%. Desde el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa han celebrado este dato, apuntando a la conjunción de progresiones positivas de las diferentes variables económicas. “La reducción continuada de la inflación sigue poniendo de manifiesto la eficacia de las medidas de política económica y la capacidad de la economía española de compatibilizar el mayor crecimiento económico entre los principales países de la zona euro, cuatro veces superior a la media de la zona euro, con una moderación de los precios”, trasladan.
La variable de crecimiento es la otra punta de lanza del departamento liderado por Carlos Cuerpo, que también han puesto en valor los datos confirmados de la Contabilidad Nacional Trimestral. “El crecimiento de la economía española es equilibrado, con aportación positiva de la demanda nacional y externa”, apunta Economía. En concreto, señalan la contribución "positiva" del consumo privado, con un crecimiento del 2,9% interanual, “impulsado por las ganancias de poder adquisitivo y la evolución del empleo”. A esta se suman el resto de componentes, que también muestran una buena evolución.
La inversión se acelera con un crecimiento del 2,2% en el último año y las exportaciones crecen un 2,6%, “reflejando la competitividad de las empresas españolas”, apuntan desde la cartera. Diferenciando por ramas de actividad económica tampoco se encuentran escollos, pues todas presentan un crecimiento positivo en los primeros meses del año, destacando el crecimiento de la industria manufacturera, con un incremento del 5,2% en el último año. En materia de empleo, si bien los salarios siguen siendo bajos, las cifras también mejoran con el transcurso de los meses.
Así, la creación de empleo se mantiene dinámica y el número de horas trabajadas se eleva un 2,4% en tasa interanual, “crecimientos compatibles con la mejora de la productividad por hora que creció el 0,7% en el último año”, apuntan desde la cartera de Cuerpo. “Los datos que hemos conocido hoy reflejan la fortaleza y crecimiento equilibrado de la economía española, que día tras día está siendo confirmado por los principales organismos nacionales e internacionales”, añaden. Se completa así la semana en la que también se ha conocido la bajada de la deuda externa española por debajo del 50% por primera vez desde 2003.
“Con estos datos culmina otra semana de buenas noticias económicas, tras la revisión al alza del crecimiento económico por parte del Gobierno y de la OCDE para España, la fuerte bajada de la inflación y el aumento del PIB y la confianza de los inversores en la economía española”, destaca Economía. No obstante, el aspecto pendiente sigue siendo el traslado a la microeconomía, pese a que el departamento asegura que “con estos factores, junto con la positiva evolución del mercado laboral, están permitiendo mejorar la capacidad de compra de los ciudadanos y la renta real de los hogares”, defiende
Así lo defiende Cuerpo que, en una entrevista concedida a RNE, ha asegurado que “esta buena evolución de la macro es una condición necesaria para que esto se traslade a los ciudadanos”. “Esto puede verse muy claramente con el mercado de trabajo y con la recuperación de los salarios, que crecen ya por encima del índice de precios y dota de mayor poder adquisitivo a los ciudadanos. Cuando comparamos con los países de nuestro entorno vemos que hemos recuperado poder adquisitivo por encima de los niveles de estos países”, ha desgranado.