Los grandes bancos de inversión del mundo y variopintos analistas se han puesto melancólicos. Y es que la que se avecina para este 2020 ocupará su hueco en la historia de las crisis económicas en el mundo. Para España ya se vaticina una caída del Producto Interior Bruto cercana al 10% que precisa de ir a la Guerra Civil de 1936 para buscar precedentes. Lo decía el propio vicepresidente del Banco Central Europeo, Luis de Guindos, que nos enfrentamos a una situación que debemos ir a buscar a tan triste precedente.

Pero los analistas han ido mucho más lejos. Cuesta saber cómo han podido recabar datos porque algunos informes se remontan a tiempos anteriores a la Era Cristiana. “Los tipos de interés más bajos en 5.000 años” reza alguno de estos informes que provocan perplejidad. La utilidad de esta visión histórica de las principales crisis es de dudosa utilidad en cuanto a saber cómo nos afectará y cuándo podremos salir de la encrucijada que nos ha traído el coronavirus tanto a nuestra salud como a nuestras economías.

No deja, eso sí, de ser curioso conocer los momentos más críticos de las principales economías mundiales. Recientemente, el alemán Deutsche Bank ha elaborado un interesante trabajo donde explica los momentos más críticos de la economía estableciendo comparaciones con la prevista en este fatídico 2020.

En el Reino Unido, uno de sus años más penosos para la economía fue 1349 causado, curiosamente, por otra pandemia, la peste bubónica que provoca una caída de su PIB del 23,5%. En el más cercano siglo XX, el peor año fue en 1921 con una brutal crisis empresarial que provocó un retraimiento económico del 9,7%. Para este año, el banco alemán espera que la economía británica se deje un 6,5% de su riqueza, lo que supondría el tercer peor año desde 1900. Eso sí, consideran que el segundo trimestre de este año será el peor en 120 años con una caída del 13,2% que luego irá mejorando hasta el resultado anual apuntado.

En Estados Unidos, los peores años en la evolución de su economía se produjeron en 1932 (empezaban las verdaderas consecuencias del crash de 1929) donde la economía se retrajo el 12,9%. Años muy bien retratados en el cine estadounidense, sobre todo de gánsters. La otra mayor recesión económica se vivió justo al término de la Segunda Guerra Mundial. En 1946, la economía de EE UU cayó el 11,6%. El país presidido por Donald Trump será de los menos afectados con una caída de su PIB en 2020 del 4,2%, porcentaje muy importante, pero lejos de los ejercicios más complicados de su historia. También será de abril a junio el periodo de mayor castigo a la economía con una caída del PIB trimestral del 9,5%.

En la vecina Francia, tanto la Primera como la Segunda Guerra Mundial dieron los años más malos para su economía con caídas de su PIB del 21,1% y del 20,8%, respectivamente. Para ese 2020 la contracción esperada se sitúa en el 6,8%, un resultado muy malo, pero lejos de esos años tan devastadoras en la riqueza de su economía.

Para Alemania, la expectativa de decrecimiento económico en 2020 se coloca en el 5,3%, casi diez veces menos a la que se produjo en 1946 cuando se PIB cayo el 52,6%. Además, este año será ligeramente mejor a 2009 con la crisis financiera e inmobiliaria cuyo mayor exponente fue la caída del banco de inversión estadounidense Lehman Brothers cuando su economía se redujo el 5,6%.

Y tirando más al sur, Italia sufrirá este año una caída de su riqueza del 8,7%, un deterioro que solo tiene precedente en los años de la Segunda Guerra Mundial, donde destaca 1944 cuando su economía se contrajo el 19,3%.

Desde finales del Siglo XIX la economía japonesa ha mostrado gran estabilidad. Este 2020 será mejor que 2009. Así, se prevé una recesión con caída del PIB del 3,9% mientras que con la crisis de Lehman su economía perdió el 3,9% de su valor. Inevitablemente, hay que ir a la Segunda Guerra Mundial para encontrar el año más negativo que fue justo el del fin de la contienda en 1945 cuando su PIB bajó el 48,3%. Con estos datos parece lógico que tenga alguna cabida el lenguaje bélico que se ha instalado en la clase política.