La quiebra de Silicon Valley Bank (SVB) al otro lado del Atlántico ya está dejando las primeras consecuencias a nivel internacional. La Reserva Federal estadounidense ha rescatado de madrugada a los clientes de SVB que, desde este mismo lunes pueden recuperar todo el dinero depositado en la entidad. Además del miedo a un efecto contagio por el recuerdo de la crisis de Lehman Brothers -materializado desde primera hora de la mañana con desplomes en las bolsas mundiales-, la quiebra de la entidad estadounidense especializada en el sector tecnológico podría tener su impacto en la política fiscal internacional. ¿Podría cambiar la tendencia expansiva de la política fiscal actual la quiebra del banco norteamericano? Goldman Sachs dice sí.

El banco de inversión estadounidense alerta este mismo lunes, tras conocerse el rescate a la entidad norteamericana, que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) va a dar un vuelco a su política fiscal y no va a subir los tipos interés de nuevo en la reunión que celebrará el próximo 22 de marzo, en menos de diez días, tal y como tenía previsto. Los analistas de Goldman Sachs han actualizado sus pronósticos y previsiones tras las turbulencias provocadas en el sector financiero estadounidense provocadas por la quiebra del SVB durante el fin de semana. "A la luz de la tensión en el sistema bancario, ya no esperamos que el FOMC realice una subida de tipos en su próxima reunión del 22 de marzo", consideran los analistas del banco de inversión.

La Fed tenía previsto aprobar una nueva subida de los tipos de interés de 25 puntos básicos, en línea con su política fiscal expansiva, actualmente en el 4,5% tras la última subida efectuada en la reunión celebrada el pasado 2 de febrero. Los expertos prevén que la tendencia alcista se pause temporalmente en la próxima reunión del 22 de marzo pero que no va a revertir al 100% la tendencia de los bancos centrales internacionales. De hecho, los analistas de Goldamn Sachs retrasan las subidas de la Fed hasta mayo, junio y julio, hasta llegar incluso a unos tipos de interés del 5,5% en la economía estadounidense.

De ser así, aunque sea solo una pausa en la política fiscal expansiva de la Fed, frenaría el ritmo de crecimiento de los tipos de interés como consecuencia únicamente de la quiebra del Silicon Valley Bank. El propio presidente de la Fed, Jerome Powell, dejaba entrever hace apenas una semana, antes de que aparecieran los primeros problemas de liquidez y solvencia en el SVB, que el banco central estaba dispuesto incluso a aumentar el ritmo de crecimiento del precio del dinero para combatir la inflación.

Lagarde no veía "ningún motivo" para no subir los tipos a primeros de marzo, ¿qué pasará en la reunión del jueves?

En la misma línea se pronunció hace diez días, el pasado 2 de marzo, la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, durante su primera entrevista como banquera central en España. Lagarde casi confirmó la subida de los tipos de interés en Europa en otros 50 puntos básicos, actualmente en el 3% tras la reunión del 8 de febrero, para llegar al 3,5% en la reunión que se celebra este mismo jueves 16 de marzo. No obstante, empiezan a surgir las dudas sobre el posible cambio de tendencia de los tipos de interés del BCE, siguiendo la estela de lo que haría la Reserva Federal estadounidense según Goldman Sachs.

“Tenemos toda la razón para creer que tendremos otra subida de 50 puntos básicos en la próxima reunión" -avanzaba la presidenta del BCE durante su entrevista en Espejo Público (Antena 3)- "No puedo decir que sí segurísimo porque dependemos de los datos, pero pensamos que así será. No tengo ningún motivo para decir que no vaya a pasar”. El 2 de marzo Lagarde no tenía “ningún motivo” para no aprobar una nueva subida de los tipos en medio de la política fiscal expansiva por la que ha apostado el banco central para frenar la inflación en el Viejo Continente. No obstante, ahora sí podría tener algún motivo para revertir, o bien pausar, la tendencia expansiva de su política fiscal. Y es que Lagarde no anticipaba el freno de la subida de los tipos de interés hasta 2025, cuando el organismo cumpla con su objetivo de estabilizar la inflación de la eurozona en el 2%.

“Es evidente que, si aumentamos los tipos de interés, eso hará que aumenten los costes financieros para los bancos. Ellos mismos cobrarán tipos de interés a quien pida préstamos y tendrá un efecto amortiguador sobre la economía", reconocía Lagarde hace apenas diez días. El sector bancario se ha convertido este lunes en el más castigado de los parqués tras la quiebra de Silicon Valley Bank, con los grandes índices internacionales en rojo y las entidades financieras con desplomes de más del 10% en algunos momentos de la sesión, como es el caso de Banco Sabadell en España.

Las subidas de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal en Estados Unidos y del Banco Central Europeo tienen su consecuencia más directa en el encarecimiento de las hipotecas a tipo variable. Un producto bancario que, como su propio nombre indica, varía su precio en función del euríbor, actualmente cerca del 4%. La quiebra del Silicon Valley Bank en Estados Unidos, el aviso de Goldman Sachs sobre un cambio en la política fiscal de la Fed y lo que pudiera ocurrir también en la reunión de este jueves del BCE han provocado un ligero cambio de tendencia en el euríbor, que cae este lunes alejándose del 3,97% del jueves 9 de marzo, antes de conocerse la quiebra del banco norteamericano.