La reforma laboral ha quedado aprobada en una polémica votación en la que el voto a favor -por error- del diputado del Partido Popular, Alberto Casero, fue decisivo para seguir adelante con la nueva legislación del mercado laboral. Más allá del debate y la polémica política, la reforma laboral contempla una serie de mejoras económicas para los trabajadores españoles, especialmente para aquellos más vulnerables.
La reforma laboral de Yolanda Díaz, acordada con sindicatos y empresarios, tiene como objetivo principal terminar con la precariedad y la temporalidad del mercado laboral. Dos efectos de los que salen perjudicados principalmente los trabajadores más vulnerables o con puestos poco cualificados. Es el caso de los empleados de empresas multiservicios, encargadas de ofrecer a las empresas personal de limpieza, jardinería o mantenimiento.
Estos empleados se acogían hasta ahora al convenio de empresa -y no al convenio sectorial- por lo que eran los empresarios quienes tenían prioridad a la hora de decidir las condiciones laborales de sus empleados. Ahora, con la vuelta a la ultraactividad y la prevalencia del convenio sectorial, las mejoras laborales se negociarán en el conjunto del sector.
Además, otro de los grandes puntos clave de la reforma laboral es la regulación de las empresas subcontratas, que tendrán que ofrecer a sus empleados las mismas condiciones laborales que la empresa principal. Es decir, el personal de limpieza subcontratado tiene, desde el pasado 30 de diciembre, los mismos derechos que por ejemplo, el personal administrativo de la empresa principal.
UGT: 73.000 trabajadores beneficiados
Las previsiones de UGT revelan que alrededor de 73.000 trabajadores se verán beneficiados por la reforma laboral, amparados en 287 convenios de empresa. Así lo avanza el sindicato en base al Registro de Convenios Colectivos del Ministerio de Trabajo y Economía Social (Regcon). No obstante, no descartan que la cifra sea incluso superior ya que aseguran que la cifra registrada está muy por debajo de la real.
"La subcontratación a través de las empresas multiservicios permite pagar una retribución mucho más baja que la que correspondería a una persona empleada de la empresa, generalmente el salario mínimo interprofesional, y sin ningún tipo de sujeción al convenio colectivo correspondiente al sector de la actividad que realizan”, denuncia el sindicato en su último informe.
Para UGT, “las empresas multiservicios se estaban aprovechando, por tanto, del mismo mercado en el que estaban actuando las ETT y de la prioridad aplicativa del convenio de empresa sobre el sectorial, fomentando la temporalidad y la degradación de las condiciones laborales de las personas trabajadoras, alejándolas, en definitiva, de las mejoras obtenidas tras años de negociación de convenios sectoriales fuertes y consolidados".
A pesar de las mejoras que trae consigo la nueva legislación, hay un problema en el caso de las empresas multiservicios: no están acogidos a un convenio sectorial propio. Es decir, a día de hoy no existe un convenio sectorial multiservicios, sino que hasta su aparición tienen que adaptarse a partir de ahora al convenio del sector al que pertenezcan. Por ejemplo, en el caso de las camareras de piso -las famosas kellys-, estas tendrán que acogerse al convenio de Limpieza de Edificios y Locales.
Para adaptar la nueva realidad legislativa a la práctica, las empresas españolas tienen ahora un plazo hasta el próximo 31 de marzo, tres meses después de la entrada en vigor de la reforma laboral. En esta fecha, las empresas españolas deberán cumplir con los aspectos de la nueva normativa, con mejoras para los sectores más vulnerables del mercado laboral.
