El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo ha lamentado el cierre de las plantas de Barcelona de Nissan a finales de este año, decisión que la compañía japonesa ha anunciado este mismo jueves. Así, Industria ha propuesto en un comunicado la creación de un grupo de trabajo para estudiar “escenarios alternativos” para garantizar la actividad industrial.
El ministerio asegura que la compañía le ha comunicado la decisión “a primera hora de esta mañana”, así como ha hecho con los sindicatos, a los que no ha dado “derecho a réplica”, tal y como ha reconocido el delegado sindical de CCOO en Nissan.
Por su parte, Industria considera que la continuidad de la planta de Barcelona es posible, según el plan de viabilidad que presentó hace unos meses, con la colaboración de la Generalitat de Cataluña, el Ayuntamiento de Barcelona y el Consorcio Zona Franca.
Del lado económico, asegura que la continuidad de la fábrica “tiene sentido económico” para la compañía ya que, como ha alertado en los últimos días, el cierre de las plantas podría suponer un coste para Nissan de más de 1.000 millones de euros, frente a la inversión de 300 millones de euros correspondiente a la adjudicación de un nuevo modelo eléctrico.
Nadia Calviño, ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, también ha mostrado su descontento esta mañana en una entrevista a TVE, donde ha asegurado que el Ejecutivo trabajará para encauzar el proceso y buscar una solución alternativa con la compañía.
"Creemos que es una planta que tiene sentido estratégico, porque se trata de la única de Nissan en Europa. Cerrar esta planta representa una decisión estratégica gran calado para Nissan", ha explicado Calviño.
