El Índice General de Producción Industrial (IPI) ha registrado una caída del 33,6% en el mes de abril, el mayor desplome interanual de toda la serie histórica, comenzada en 1976, según los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

El descenso es consecuencia directa del impacto del coronavirus y de las medidas de restricción derivadas de la crisis sanitaria. De hecho, gran parte del sector industrial permaneció cerrado durante la primera quincena de abril, cuando se puso en marcha el permiso retribuido recuperable para trabajadores no esenciales. 

Con este desplome, la tasa ya encadena dos meses consecutivos en terreno negativo como consecuencia del impacto del Covid-19. Precisamente la caída en el mes de abril supera el que hasta ahora era el mayor retroceso interanual, en abril de 2009, cuando cayó un 28,4%. 

Corregida de efectos estacionales y de calendario, la producción industrial se hundió también un 33,6% interanual en abril.

En tasa mensual, corregida de efectos estacionales y de calendario, la producción industrial también experimentó un retroceso del 21,8%, frente a la caída del 13,2% experimentada en marzo.

La producción de la automoción cae un 92%

El INE subraya que la declaración del estado de alarma y la entrada en vigor del permiso retribuido recuperable para las personas trabajadoras por cuenta ajena que no prestaban servicios esenciales han provocado una paralización casi total de la mayor parte del tejido productivo industrial durante la primera parte de abril y una posterior reincorporación paulatina y escalonada de la actividad.

El organismo recuerda que la industria de la automoción ha sido la más afectada por estas circunstancias, con un descenso de su producción del 92% respecto al mes de abril del año pasado.

Asimismo, el INE destaca que la situación de confinamiento de los hogares ha provocado una "fuerte reducción" de la demanda de bienes personales y para el hogar, por lo que la confección de prendas de vestir, la industria del cuero y calzado y la fabricación de muebles registraron en abril descensos en su producción superiores al 70%.

Pese a que los productos alimenticios han sido los bienes que mayoritariamente han consumido los hogares durante el estado de alarma, la industria de la alimentación también bajó en abril su ritmo de producción, con un descenso interanual del 7,3%, frente al repunte del 3,6% que experimentó en marzo.

No obstante, la producción de conservas, tanto de pescado, como de frutas y hortalizas y la fabricación de productos de molinería y de productos para la alimentación animal, mantuvieron tasas anuales positivas, en tanto que la fabricación de productos farmacéuticos registró la menor disminución de toda la industria, con un leve retroceso del 0,4%.