El Consejo de Ministros se reúne este viernes de forma extraordinaria para aprobar el tope en el precio del gas con el que se pretende bajar la factura del recibo de la luz. Fue el pasado miércoles cuando Teresa Ribera, vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, avanzó que esperaba que la medida se aprobase este viernes “de forma simultánea en Portugal y en España”, y, este jueves, Pedro Sánchez lo ha confirmado y ha avanzado los detalles.

Sánchez ha cifrado en 48,8 euros el megavatio hora la media que alcanzará el precio del gas durante los doce meses de vigencia de la propuesta, con lo que se busca rebajar la factura de los consumidores en un 30%. De entrada, el precio del gas “tendrá un tope de 40 euros, frente a los 72 euros de ayer o los 80 del último trimestre”, lo que supone “la mitad”, ha remarcado el presidente del Gobierno, para continuar explicando que el objetivo es cerrar en la media de los 48,8 euros.

“Es una importante protección y factor de predictivo ligada ante futuras subidas en un escenario de incertidumbre y volatilidad. También será aprobado mañana en Portugal, una muestra más de la estrecha colaboración de los dos gobiernos. El iberismo sienta bien a Europa y a la construcción europea, y lo vamos a demostrar tanto en Lisboa como en Madrid”, ha añadido Sánchez.

Con la aprobación de la medida este viernes, el tope del gas entraría en funcionamiento casi un mes y medio después de su anuncio y más de 15 días después de la intención inicial del Gobierno, que esperaba tenerlo operativo a principios de mayo. Fue a finales de la semana pasada cuando España y Portugal enviaron su propuesta conjunta a la Comisión Europea tras arduas semanas de negociaciones técnicas, y el pasado lunes recibieron la luz verde de Bruselas.

Acuerdo con la Unión Europea

España y Portugal anunciaron a finales del pasado mes de abril que habían llegado a un acuerdo político con la Comisión Europea para limitar en el mercado mayorista de la electricidad en ambos países el precio del gas, utilizado por las centrales de ciclo combinado para producir luz, y aliviar de esta forma la factura de los consumidores, que se ha visto notablemente incrementada en los últimos meses.

Este acuerdo, alineado con la decisión del Consejo Europeo del 24 y 25 de marzo, es compatible con el tratado y los reglamentos y permite poner en marcha un mecanismo temporal a ambos países de la Península Ibérica que dé cobertura hasta el final del próximo invierno. Todos los consumidores se verán beneficiados de este mecanismo.

Además, es ahora cuando Bruselas se ha abierto a estudiar la implantación de este plan para topar el precio del gas en toda Europa. La que nació como una idea “ibérica” de España y Portugal para topar el precio del gas y frenar con ello la escalada de precios eléctricos, se está estudiando para implantarse en toda Europa. De esta forma, la Comisión Europea estudia una propuesta para permitir que todos los países de la Unión Europea puedan limitar el precio del gas ante la amenaza por el suministro procedente de Rusia.