El hecho de que Nintendo financie y publique un título como
Yoshi’s Woolly World teniendo en cuenta cómo está funcionando Wii U en el mercado es poco menos que un acto de rebeldía. Para un sector de los aficionados al videojuego de todo el mundo,
Nintendo parece haberse desconectado de los tiempos que corren, ajena a las corrientes comerciales que abogan por consolas de gran músculo gráfico acompañadas de títulos con rostro y alma de lo más maduros.
Yoshi’s Woolly World, un juego protagonizado por un adorable dinosaurio dando saltos en un mundo de lana, es la prueba definitiva de que, pese a sus errores, Nintendo sigue aquí, consciente de los cambios en la industria pero manteniendo un claro objetivo en mente: la excelencia en todas y cada una de sus producciones.
Tras el éxito de la saga
Yoshi’s Island y su incursión en solitario en el catálogo de Nintendo 64 con
Yoshi’s Story, el dinosaurio más famoso del mundo del videojuego vuelve a protagonizar una aventura él solito en la actual sobremesa de Nintendo. El estudio encargado de su desarrollo fue nada menos que Good-Feel, estudio
second party de Nintendo que ya coqueteó con el universo textil en Wii con
Kirby’s Epic Yarn. El resultado fue inmejorable, desarrollando uno de los mejores plataformas de la pasada generación de videoconsolas. Con la ardua tarea de concebir un nuevo juego de Yoshi para una Wii U ávida de títulos de referencia, Good-Feel tomó la decisión de ampliar el preciosista universo de hilo y aguja ideado en su anterior título y llevarlo al universo del dinosaurio.
El resultado a nivel visual es, como se aprecia en las imágenes, sencillamente arrebatador: los gráficos en alta definición de Wii U llevan el concepto de mundos basados en elementos textiles a otra dimensión. Nubes de algodón, montañas de lana, enemigos de punto… el equipo de Good-Feel ha sabido pulir todo lo visto en
Kirby’s Epic Yarn y llevarlo de forma magistral a un nuevo videojuego.
Aunque el acabado artístico de
Yoshi’s Woolly World es en sí mismo toda una experiencia de juego, lo cierto es que el maravilloso diseño de niveles consigue en ocasiones hacerle sombra. En esta aventura, Yoshi deberá rescatar a sus hermanos de colores de las garras del malvado Kamek, quien ha robado los ovillos de colores, indispensables para la existencia de estos dragones. El intrascendente argumento del juego es el motivo por el que el jugadore recorrerá con Yoshi un total de seis mundos, cada uno de ellos únicos tanto en lo plástico como lo jugable. Nivel tras nivel, secreto tras secreto, enemigo tras enemigo:
Good-Feel consigue sorprender al jugador a cada momento, llevándole de la mano de forma intuitiva para que, cuanto antes, comprenda las normas internas de este peculiar universo y poder exprimirlo al máximo.
Como viene siendo costumbre en los títulos protagonizados por Yoshi, existen dos formas bien diferenciadas de superar
Yoshi’s Woolly World. En la primera de ellas, los jugadores menos experimentados disfrutarán de la aventura sin un excesivo nivel de complicación, superando todos los niveles para conseguir llegar al enemigo final y, tras vencerle, pasar a los títulos de crédito. En la segunda, jugadores más experimentados y ávidos de experiencias exigentes se dedicarán en cuerpo y alma a recolectar los distintos coleccionables que Good-Feel ha repartido a lo largo de los seis mundos que componen el juego: los ovillos, las monedas verdes y las flores. Los primeros permiten recuperar a los Yoshi de colores; las segundas desbloquean sellos para Miiverse; y las terceras, las más difíciles de encontrar, desbloquean niveles ocultos. Para superar el juego al 100% es necesario encontrar todos los objetos coleccionables y acabar todos y cada uno de los niveles con los corazones de salud al máximo. Sin duda, un reto a la altura de los más completistas, que hará las delicias de todos esos jugadores que busquen en
Yoshi’s Woolly World un videojuego con sabor a vieja escuela nintendera.
Con todo esto, la obra de Good-Feel se postula como un auténtico clásico instantáneo, un título que justifica en sí mismo la compra de una Wii U y en definitiva, con permiso de fontaneros y gorilas, el mejor plataformas de la presente generación de videojuegos.
Brillante, tierno, ameno, precioso y sobre todo sorprendente de principio a fin. Una auténtica joya de hilo para el catálogo de Wii U.
[cita alineacion="izquierda" ancho="50%"]Yoshi’s Woolly World[/cita]
Plataforma probada: Wii U
Desarrollador: Good-Feel
Distribuidor: Nintendo
