A medida que se acerca el 12 de julio, Vox intensifica su puesta en escena en el País Vasco con el objetivo de conseguir entrar en el Parlamento Vasco. Por ello, este viernes el secretario general de la formación ultraderechista, Javier Ortega Smith, ha decidido arropar a la candidata de la extrema derecha María Perez en un mitin que se ha celebrado en el barrio de Loiola de San Sebastián.

El acto ha comenzado a la hora prevista, las 20.00 horas, si bien, antes del inicio del acto, en la plaza Latsari de la capital guipuzcoana, efectivos de la Ertzaintza se han apostado en el lugar en el que los dirigentes de Vox se han dirigido a los asistentes, menos de un centenar.

Los policías vascos han acordonado el lugar y han colocado precinto en las calles de acceso, para acotar el espacio elegido para el acto electoral, mientras algunos concentrados proferían gritos en contra de la formación que lidera Santiago Abascal. Sin embargo, la Ertzaintza les ha impedido acercarse hasta el espacio en el que se ha desarrollado el acto electoral, que se ha prolongado durante unos 20 minutos. Una vez concluido el mitin, los congregados en las calle adyacentes han comenzado a arrojar objetes contundentes y botellas a los ertzainas, y a volcar algún contenedor, al que han prendido fuego, que ha sido apagado por los Bomberos. La Policía ha efectuado alguna carga contra con los concentrados.

Todo esto ha sido filmado por el siempre polémico Javier Negre, quien después del mitin ha protagonizado una fuera discusión con un ertzaintza, después de que un agente le instara a dejar de provocar y que se subiera al vehículo que le esperaba al extrabajador de El Mundo y abandonara el lugar. “Que sepa que grabar no es alentar nada eh, yo hago periodismo”, replicaba por su parte Negre, quien ya dentro del coche calificaba al ertzaintza como “retrasado”. “Aquí el retrasado del ertzaina diciendo que yo aliento a los proetarras por grabarles a 150 metros de distancia”, criticaba el periodista.

Instantes después de este incidente, no dudaba en encararse con un grupo de jóvenes que le estaban increpando. “Condena el terrorismo, condena a ETA y deja de jugar al Fornite. Ponte a trabajar ya que sois niños. Estáis todo el día jugando al Fornite y fumados. Recoged el cuarto, anda”, voceaba este ante la mirada de media docena de jóvenes.