El revuelo acerca del cartel de la Semana Santa de Sevilla continúa dando de qué hablar a nivel mediático y en redes sociales, resaltando así una de las opiniones más esperadas procedente del mundo del famoseo, la de Tamara Falcó.

Como viene siendo habitual, sus palabras se dieron en la mesa de debate de ‘El Hormiguero’, donde los colaboradores abordan y valoran temáticas de actualidad y, sobre esta polémica, se pronunció la marquesa de Griñón: “A este artista -Salustiano- lo han escogido porque sabían cómo era su obra. Él tiene licencia artística para hacer lo que él cree que es un Jesucristo resucitado”, comenzó señalando después de que el presentador, Pablo Motos, le instase a dar su sincera opinión al respecto.

“De ahí he leído que ha cogido a su hijo como modelo y, al final, decir si es afeminado o no, me parece agresivo. Y es que viendo otras obras de arte suyas, pues se entiende. ¿Qué es menos tradicional? Sí ¿Qué es verdad que yo estoy acostumbrada a ver un Cristo más como el de la pasión? También. Pero por lo que he leído el artista no estaba haciendo eso”, continuó defendiendo.

Pese a que Nuria Roca, por su parte, señalaba a continuación que el cartel de la Semana Santa de Sevilla “siempre es polémico”, Falcó iba un paso más allá en su valoración: “Lo que pasa es que hay un punto más, que para nosotros es una imagen sagrada. Hay unas imágenes de este mismo artista que son provocativas. Esto, al final, es lo que sabían que iba a hacer”, terminó sentenciando la hija de Isabel Preysler.

Revuelo por el cartel de Semana Santa

Pese a que quedan dos meses para esta festividad, lo cierto es que la presentación de la obra que ha servido como plato entrante de la Semana Santa en Sevilla ha adelantado el debate popular antes de lo previsto.

El artista Salustiano presentó el pasado 27 de enero, junto al Consejo de Hermandades y Cofradías de Sevilla, en la Fundación Caja Rural del Sur su obra, la cual, siguiendo su exposición, refleja “la parte luminosa de la Semana Santa” evocando así a la imagen de Jesucristo resucitado.

Como bien señaló Tamara Falcó en su opinión, el artista se basó en su hijo para pintar el retrato de Cristo y, además, se inspiró en la muerte de su hermano, quien falleció a los 12 años de edad. Después, ante el aluvión de críticas que recibió la obra, el pintor señaló que, en relación con el paño que cubre sus caderas, siendo la única vestimenta de esta representación sagrada, dijo que se centró en el Santísimo Cristo de la Expiración de la Hermandad del Cachorro de Sevilla.

"A Jesucristo le parecerían muy mal esas críticas en las redes", subrayó entonces Salustiano en alusión a los mensajes homófobos que se han sucedido desde que el cartel fue descubierto. "Me parece muy sucio y poco cristiano. Estamos en 2024 y la homosexualidad había dejado de ser un insulto", remarcó en su reacción a las críticas.

Tal fue la magnitud del revuelo que incluso organizaciones ultracatólicas advirtieron con actuar por la vía legal. Así amenazaron desde Abogados Cristianos en redes sociales, conocidos por sus ya numerosas querellas contra todo aquello que consideran una ofensa a la religión o a la “ideología de género”, término que emplean para referirse a cuestiones relativas al feminismo o los derechos LGTBI. Y esta vez, ante la imagen de un Cristo que consideran “afeminado”, no iba a ser distinto.

 

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