La semana pasada, un anciano era agredido, presuntamente, por varios ciudadanos de origen magrebí en Torre Pacheco. Desde entonces, la localidad murciana es testigo de noches de altercados provocadas por las "cacerías" xenófobas que se están llevando a cabo por grupos ultras. Desde la derecha y ultraderecha han agitado el avispero; es el caso de Vox, que ha culpado a PP y PSOE de la escalada de la crispación y ha rechazado responsabilidades. Desde Mañaneros 360, Sarah Santaolalla clamaba contra el "terrorismo racista". 

Las redes sociales han vuelto a jugar un papel esencial una vez más. Desde el primer día, los bulos comenzaron a correr, alimentando la tensión y, también, la violencia. Y es que, las convocatorias de los grupos ultras también se difundieron por la red. No obstante, tal y como señalaba la analista política, no han sido el único vehículo en este asunto: "Creo que es muy cobarde quedarse solo con las redes sociales. Esto no nace en las redes sociales, nace en los partidos políticos".

"Creo que es muy sencillo por parte del alcalde de Torre Pacheco o de algunos dirigentes culpar al imbécil que nace en un canal de Telegram y no quedarse con quien se sube a su tribuna, con quien desde su escaño con el dinero de todos los españoles, incluso también los que no les gustan, estos que tienen padres de otros orígenes, señala al inmigrante, señala con discursos de odio", proseguía Santaolalla.

"Creo que es muy fácil quedarse con los canales de Telegram, esto ha nacido en una democracia", decía, con contundencia. Santaolalla aseguraba que lo que está ocurriendo a raíz de "estos discursos de odio" es "terrorismo racista": "Es terrorismo lo que está pasando en Torre Pacheco y lo que pasará en otros sitios si esto no se corta de raíz, no entiende de medias tintas, de peros, no entiende de 'no vamos a deportar pero son demasiado malos', no entiende de 'esto es racismo pero".

La colaboradora se mostraba muy tajante con partidos como Vox, que han echado más leña al fuego. Desde Bambú ya han propuesto “deportaciones masivas” a modo de solución a la escalada de violencia. "Esto es terrorismo racista y no hay que culpar al inmigrante, hay que ilegalizar a los partidos fascistas que señalan siempre a los más débiles. Lo hacen con los que más fácil lo tienen que son con los niños que se juegan la vida en un cayuco y con los de fuera que vienen a este país a levantarlo y a trabajar. Y si no que vayan a la fresa de Huelva con cuarenta grados a dejarse la piel como hacen ellos o si no que vayan a nuestros campos porque están levantando el campo español todos aquellos que Vox quiere expulsar", sentenciaba Santaolalla, muy enfadada. 

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