Tras más de un mes de caos, negociaciones fallidas y decapitaciones en el seno de RTVE, el Consejo de Administración del ente público aprobaba el fichaje de David Broncano este miércoles. Así, La Resistencia se incorporará a la parrilla de la televisión pública, provocando la indignación de la derecha mediática. Carlos Herrera vertía una peligrosa acusación sobre el gobierno de Sánchez y apuntaba a que se trata de una "imposición".
Este jueves 11 de abril, Carlos Herrera hacía un repaso de la actualidad en Herrera en COPE. Entre los temas que llenaban la agenda, al locutor no se le escapa la resolución final del culebrón Broncano. De hecho, introducía el asunto cargando directamente contra el gobierno: "La España de Sánchez es así. No puede aprobar presupuestos. Ni puede cumplir compromisos internacionales. Pero bueno, se contenta con hacer demagogia, que marque los senos en el Falcon", arrancaba.
Herrera apuntaba entonces que el Gobierno ha decidido "imponer a la televisión" el fichaje de Broncano "en condiciones leoninas ajenas a la práctica habitual de ese sector": "Que yo no sé, a este humorista Broncano, si le conviene", planteaba. Además, el locutor aseguraba que el de Movistar Plus+ se ha visto sometido a un "señalamiento" que no ha hecho más que empezar. "¿Va a dejar que le señalen como un sanchista que va allí encargado a que Sánchez no sufra tanto con los programas de Pablo Motos? Pues tendrá que defenderse de alguna manera. Vamos, yo... Supongo, no lo sé, yo no lo conozco. No sé por dónde anda, pero... ", decía el periodista, haciendo referencia a las palabras de medios afines a la derecha, que han asegurado que se está produciendo una "instrumentalización política" de la figura de Broncano.
Por otro lado, Herrera apuntaba a que el fichaje no debe de mirarse como algo positivo para el sector televisivo: "Oiga, lo de ayer deja en pésimo lugar a todos los profesionales de televisión, a los activistas de los viernes negros, a los demagogos de la televisión de servicio público, a los cantos sobre la independencia profesional, todas estas bobadas que nos han contado". Y, acto seguido, comenzaba su acusación al Ejecutivo.
"Es una obscena injerencia del gobierno en la televisión pública. Todo financiado con dinero de los impuestos para convertir TVE en un altavoz del sanchismo. O sea, no ya solo el control de los informativos, sino también de los contenidos de programas de entretenimiento. Ninguna televisión privada hubiera aceptado un contrato como el que se le ha hecho a la productora de este hombre, ninguna", arremetía Herrera. Antes de finalizar su monólogo, el locutor aseguraba que Sánchez había recurrido a dinero público para generar la ansiada competencia a El Hormiguero, estrategia que también señala la derecha mediática: "Y esa competencia la pagó usted con sus impuestos, ¿eh? Y a hacer ricas a unas cuantas productoras privadas amigas del gobierno. Bueno, y sin la carta de recomendación de Begoña Gómez", concluía.
La derecha mediática, contra el fichaje de David Broncano
Desde que saltara la noticia relacionada con el posible fichaje de David Broncano, así como las condiciones que se estaban negociando con respecto al contrato, la derecha mediática ha mostrado su oposición a la incorporación de La Resistencia a la televisión pública.
Entre los más críticos, otro locutor: Federico Jiménez Losantos. Hace unas semanas, el periodista criticó a Broncano en las páginas de El Mundo, recordando un cántico del presentador antes del estallido de la pandemia: “¡Coronavirus, oé!; ¡Coronavirus, oé!”. Losantos sugirió sarcásticamente que TVE quiere premiar la trayectoria de "servicio público" con un contrato de 47 millones de euros en tres años, independientemente de la audiencia del programa: "Qué mejor forma de invertir nuestros impuestos que acabar con el imperio de Pablo Motos exponiéndolo al Broncanovirus", decía antes de advertir que "el virus es contagioso y letal". El periodista mencionó las "presiones" del Gobierno, tal y como han mencionado los medios afines a la derecha, para llevar adelante el fichaje y señaló la afinidad de Broncano con los ideales de izquierda, diciendo: “Ideal. Ya veo al rojeras millonario haciendo corear al público: ‘Perrosanxe, oé; Perrosanxe, oé”.
El mismo medio hablaba de una "instrumentalización política" de la figura de Broncano y se cuestionaba la vocación de servicio público del ente. Se arremetió contra el Ejecutivo por “su afán por controlar” una RTVE “convertida en un aparato al servicio del poder político”. Como puntos controvertidos del fichaje, señalaron algunas condiciones del contrato, como un posible recorte del tiempo del Telediario, lo que podría provocar una "erosión" del "compromiso informativo de la cadena pública".
En la misma línea se movía El Confidencial, donde José Antonio Zarzalejos publicaba un análisis bajo el siguiente titular: “La Moncloa asalta también TVE (el caso Broncano)”. En él, admitía que todos los inquilinos del palacio presidencial han sucumbido a los “efectos lisérgicos” del poder, aunque apostillaba que “ninguna ha quedado más embriagado por esos efluvios que Pedro Sánchez”. “Se ha rodeado de un cinturón de poderes administrativos exorbitantes que ejecutan con escaso escrúpulo un grupo de personas que ha deambulado con incoherencia en su trayectoria y que ya no tiene otra opción que seguir pedaleando para no caerse y continuar en su subalterna misión de gregario del líder”, continuaba el comunicador.
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