La polémica parece inherente al Festival de Eurovisión, y la última edición así lo demuestra. Con las peticiones de distintas cadenas públicas sobre la mesa, la cúpula de la Unión Europea de Radiodifusión (UER) ha respondido para defender el sistema de televoto actual. Asegurando que es "el más avanzado del mundo", la organización del certamen pretende dar carpetazo a la auditoría solicitada por parte de Televisión Española (TVE). La audiencia, por su parte, llegó a manifestar que podía tratarse de un resultado 'fraudulento' en caso de haberse confirmado unas sospechas ya desmentidas.
Después de que el voto popular español considerase que Israel debía llevarse la máxima puntuación, nuestra Corporación Pública pidió un análisis de lo ocurrido. Y es que las redes sociales se llenaron de mensajes israelíes para alentar a que la audiencia apoyase la candidatura de Yuval Raphael. También se denunció la organización de distintos grupos para boicotear la clasificación final de Eurovisión 2025.
El director de Eurovisión niega votaciones irregulares
Martis Green, en calidad de director de Eurovisión, se ha pronunciado al respecto tras una pregunta de la Agencia EFE. "Los resultados de cada país son revisados y verificados por un amplio equipo de personas para descartar cualquier patrón de votación sospechoso o irregular", ha señalado. Además, confirma que los espectadores españoles, por segundo año consecutivo, consideraron que las "zonas en conflicto bélico" debían alcanzar las máximas puntuaciones.
A través de un comunicado, Green también ha respondido a la cadena belga VTR: "Mantenemos un contacto constante con todas las emisoras participante y nos tomamos muy en serio sus preocupaciones. Una vez finalizado el evento, mantendremos una amplia conversación con ellas para reflexionar y recibir sus comentarios sobre todos los aspectos del evento de este 2025".
En el mismo sentido, ha añadido que "forma parte del proceso de planificación para la 70ª edición del Festival de la Canción de Eurovisión del próximo" y que "es importante destacar que el proceso de votación de Eurovisión es el más avanzado del mundo y que los resultados de cada país son comprobados y verificados por un gran equipo de personas para descartar cualquier tipo de patrón de votación sospechoso o irregular".
Asimismo, ha detallado cuál es el funcionamiento del proceso de comprobación del televoto ante posibles fraudes: "Un dispositivo de verificación independiente coteja los datos de votación del jurado y del público para garantizar un resultado válido". "Nuestro socio de puntuación, Once, ha confirmado que se ha registrado una votación válida en todos los países participantes en la gran final de este año, así como en el resto del mundo", ha zanjado.