Netflix estrenaba 'El cuerpo en llamas' el 8 de septiembre de 2023, protagonizada por Úrsula Corberó y Quim Gutiérrez. La miniserie, basada en hechos reales, narra la historia del crimen de la Guardia Urbana ocurrido en Barcelona en 2017, que involucró a Rosa Peral y Albert López, dos agentes, después de asesinar a otro policía, Pedro Rodríguez. Tras tres años de proceso judicial, ambos ingresaron en prisión, dónde fueron condenados a pasar 25 y 20 años, respectivamente. Desde que la noticia saltó a la luz, los medios comenzaron a difundir, de manera cuanto menos morbosa, todo tipo de detalles en cuanto a los protagonistas, puesto que Peral, López y Rodríguez conformaban un triángulo amoroso. Pero, sin duda alguna, la más señalada fue ella, a la que se tachó de "manipuladora" o "peligrosa". Tras el ingreso en prisión, el asunto pasó a un segundo plano, pero, ahora, con el estreno de la ficción, la plataforma ha reavivado el interés en torno a Peral, a quién han terminado sentenciando mediáticamente. 

Vehiculado en la interpretación de una gran Úrsula Corberó, la plataforma hace un claro retrato de Rosa Peral: manipuladora, fría, depresiva, capaz de malmeter a su hija para que no quiera ver a su padre y, sobre todo, femme fatale. La producción dibuja una protagonista morbosa que mantiene distintas relaciones con hombres a la vez, a los que seduce para conseguir lo que quiere en cada momento de su vida. Se trata de un reflejo de lo ocurrido durante el juicio, donde la opinión pública ya había sentenciado a la exguardia urbana antes de haberse sentado en el banquillo a raíz del perfil al que los medios habían dado voz. Es más, la propia defensa de la finalmente condenada, se quejó en distintas ocasiones de que se hablaba de Peral por "morbo", juzgándose "el pecado" y las "relaciones sexuales" que mantenía. 

Muy probablemente, la pregunta que nos podemos pensando en la condenada es la siguiente: ¿Era realmente necesario producir 'El cuerpo en llamas'? Aunque se puede argumentar que se trata de una serie basada en hechos reales como tantas otras han existido y existirán, lo cierto es que ha vuelto a poner a Peral en el disparadero mediático. De hecho, la propia protagonista intentó impedir desde prisión que el proyecto viera la luz y solicitaba su secuestro en el juzgado ante una posible vulneración del derecho al honor. Sin embargo, la Justicia terminaba desestimando su petición. A raíz del estreno, los medios llenaban de nuevo sus agendas con más informaciones sobre Rosa, volviendo a indagar en la parcela de su intimidad. La actriz que le da vida hacía la siguiente reflexión: "Si Rosa hubiera sido un hombre, ¿habría sido tan noticia?" Y es que, lo cierto es que poco se conoce de la vida privada de Albert López y del fallecido Pedro Rodríguez.

Los medios volvían a juzgar públicamente a la ya condenada y volvían a la carga con artículos con titulares como "La verdad sobre Rosa Peral" o "¿Por qué Rosa Peral es experta en seleccionar "hombres vulnerables"?: Así es su perfil psicológico". Tampoco dudaban en recurrir a expertos a los que preguntarles sobre "personalidades psicopáticas" o "la instrumentación de las relaciones", con el fin de relacionar estos conceptos con Peral. Además, tampoco se ha respetado su privacidad en la prisión donde cumple condena. El programa 'Y ahora, Sonsoles' no dudaba en publicar unas imágenes de Peral en las que se le veía subida al escenario de la cárcel mientras participaba en una obra de teatro. El formato afirmaba que podría ser autobiográfica, puesto que la catalana pronunciaba frases como: "Tenía una vida, tengo un pasado, quería vivirla, quiero olvidarlo. Recuerdo esos días, me hicieron daño". Por otro lado, 'Equipo de investigación', de LaSexta, sacaba a la luz nuevos mensajes entre Albert López y Rosa Peral fechados antes y después del asesinato. "Eres una puta y una mentirosa. Tu 'Pedrito' quedó contigo en Sort y fuera de juzgados, igual que en tu casa. Eres lo peor y te has cargado lo nuestro por cuatro polvos de mierda. Eres una mentirosa y una falsa y no tienes cojones de decir la verdad y ser sincera", emitían. 

Por otro lado, la prensa también ha intentado indagar sobre qué ocurrió con las dos hijas de la protagonista, fruto de su anterior matrimonio, tras su ingreso en menor: dónde viven y con quién, cómo es la relación con su padre, cómo fue su primera visita a la cárcel, etc. Cabe mencionar que ambas son aún menores, puesto que cuando ocurrió el suceso tenían seis y cuatro años, respectivamente. La ficción de Netflix difiere de la realidad en este aspecto, y únicamente representa a una de ellas, a la mayor. En una entrevista, la abogada de Peral se quejaba y aseguraba que "es una adolescente" que "va al instituto, todo el mundo está viendo la serie": "Nadie se ha parado a pensar en el dolor que sufre esta niña", defendía. 

'Las cintas de Rosa Peral': las declaraciones que le costaron un castigo

Tras el estreno de 'El cuerpo en llamas', Netflix sumaba a su catálogo otro contenido relacionado con la exagente: 'Las cintas de Rosa Peral'. La película documental rememora cómo los medios trataron el asunto, y recuerda algunas duras palabras que se pronunciaron en la pequeña pantalla antes de que la Justicia dictara sentencia: "Su novio no es el primer cadáver que tiene en su vida". La prensa le dedicó todo tipo de adjetivos, llegándola a nombrar como "la viuda negra de la Guardia Urbana". Además de contar con el testimonio de abogados, periodistas, jueces, de la abogada de la condenada e incluso de su padre, es la propia Peral la que ha aportado su testimonio, por primera vez, desde la cárcel. Pegada a un teléfono, los espectadores pueden ver la cara de la protagonista mientras que se defiende de todas las "barbaridades" que tuvo que escuchar. 

Tal y como el periodista Carlos Quílez apunta en el documental, los medios vieron en Rosa y su caso el blanco perfecto para seducir a la audiencia: "Una mujer joven, guapa, en términos judeocristianos, promiscua en lo sexual, que además pertenece a un cuerpo policial, acusada del asesinato a su pareja. Los crímenes pasionales nos encantan. Es que se han dado todas las circunstancias golosas para que entráramos a machete en el tema", reconocía. En la producción, la protagonista se refiere al "derecho a la información" del que hablan los medios, y apostilla: "¿Qué tipo de información es esa?" Tras el estreno del documental, Peral fue castigada por conceder entrevistas, sin permiso, desde la prisión. Durante dos semanas, la exagente solo ha podido llamar a familiares de primer y segundo grado y, además, se le restringieron las visitas presenciales.