Como cada Nochevieja desde 2014, millones de espectadores estaban expectantes ante el vestido que llevaría Cristina Pedroche en las Campanadas de Antena 3. Poco antes de las 00:00 horas, la vallecana desvelaba su secreto mejor garduado. En esta ocasión, lucía un diseño en que "litros de mi leche materna convertidos en 8500 joyas". La colaboradora visitaba Zapeando este jueves, 2 de enero, y desvelaba el "problema" personal que se esconde tras la propuesta.

Pedroche era recibida entre aplausos por el equipo capitaneado por Miki Nadal. Aunque en esta ocasión las Campanadas de Antena 3 quedaban en segundo lugar, perdiendo el liderato que ostentaban desde 2021, lograban un gran 28,1% de share, o lo que es lo mismo, 4.345.000 televidentes de media. Y es que, el 'efecto Pedroche' sigue funcionando una década después: "La expectación máxima estaba donde estaba todos los años, en Antena 3, con todo el mundo pendiente de descubrir el vestido que iba a llevar la Pedroche", decía el presentador. "Has vuelto a demostrar que no eres flor de un día. Once años después ahí, arrasando en audiencias", añadía, antes de que ella tomara la palabra.

"Estoy muy contenta y muy tranquila. Es el año que mejor estoy a día 2 de enero. Otros años a veces estoy más disgustada por lo que se ha dicho. Recomiendo mucho para la salud mental no entrar en redes sociales. Estoy muy bien, muy orgullosa del trabajo que hemos hecho todos, de mi equipo maravilloso y de Josie, que es un genio y es una suerte contar con él", decía, poniendo el valor el trabajo realizado por su equipo.

En un ejercicio de instrospección, la madrileña también compartió su valoración personal: "Para mí han sido las mejores Campanadas, la mejor retransmisión. Me fui supercontenta de la Puerta del Sol y sigo con esa energía". Tanto es así, que aseguró que ya tiene la mente puesta en la retransmisión del próximo año: "Normalmente cuando termino las Campanadas me pongo en modo off, y este año estoy muy creativa y muy inquieta".

Lo que escondía su vestido hecho con leche materna

Tras quitarse la capa que cubría su mayor secreto, Pedroche compartía con los espectadores la magia que se escondía tras su diseño hecho con leche materna: "42 kg de vestido compuesto por corsé, casquete y guardainfantes, aunque durante la retransmisión nunca me había sentido tan liviana. 2500 horas de trabajo. Sigo en una nube...". 

Días después, en su primera aparición en Zapeando, la colaboradora desveló cómo surgió la idea y qué se esconde tras ella: "A mí me conocéis y sabéis que de un problema saco una oportunidad. Como todas las madres cuando vuelven al trabajo, quería conciliar y quería seguir dando el pecho. Me fui sacando leche, pero llegó un momento que mi hija no quería la leche en biberón, sólo quería la teta, y se me caducó".

Pedroche habló entonces con su "asesora de lactancia" porque "no sabía qué podía hacer con esa leche caducada, que era comida de mi hija y había puesto en ello muchas horas": "Me recomendó que me diese un baño de leche, pero pensé en hacerme una joya grande. Hablé con Belén, la de las joyas y le dije a Josie 'tengo cuatro litros de leche". La presentadora quiso dejar claro que "toda la leche utilizada es no apta para el consumo de mi bebé", motivo por el que decidió darle una segunda vida. Además, contó que con el sobrante le hicieron una diadema, que portaba sobre su cabeza en ese mismo instante. 

Este diseño es el más especial para la presentadora, por lo que no dudó en defenderlo ante las críticas: "Esto no es un vestido, esto va más allá. Esto es una causa, esto es emocionarte. No te deja indiferente. No sólo porque lleve los litros de leche, sino por las horas que hay invertidas en esto [un total de 2.500 horas]".