Facu Díaz ha sido el último rostro de relevancia en el universo online encargado de iniciar una nueva ola de cancelaciones a Pablo Motos. Como era de esperar, las redes sociales poco tardaron en llenarse de comentarios negativos al respecto y Bob Pop ha sido uno de los tantos que han aplaudido como nadie este curioso movimiento. Durante todo el fin de semana, el crítico televisivo se ha encargado de recopilar cada tajante crítica al grito de "esto es un no parar maravilloso".

En este sentido, un vídeo de Facu Díaz se viralizó como pocas veces antes mientras se mostraba rotundamente en contra de lo que él califica como "cinismo" respecto a Pablo Motos. "Llama a cómicos para pedirles que quiten chistes de sus shows. [...] Te dice que no se puede decir nada mientras presiona a cómicos", aseguraba de manera rotunda y con beligerancia en su tono de voz. Desde ese momento, Bob Pop puso en marcha en ejercicio de recopilación para rememorar acusaciones muy contundentes hacia el presentador habitual de 'El Hormiguero'.

Bob Pop y el "no parar maravilloso" de las críticas

En primer lugar, el humorista recuperó un hilo de comentarios publicado por Álvaro Terán el 26 de noviembre de 2022. Por entonces, el autor contaba que recibió una llamada de la productora 7 y Acción para criticar unas viñetas publicadas por la revista El Jueves coincidiendo con el 15º aniversario de 'El Hormiguero'. Entre otras cosas, destacó esa conversación como una "amenaza pasivo agresiva", "una bronca paternalista" o un "aviso de vigilancia".

Las viñetas en cuestión mostraban a una Pablo Motos caricaturizado como si fuese una babosa o a dos hormigas muy sobrepasadas junto al Cigala con sus narices cubiertas de blanco. No obstante, lo que más sensación causó fue que Will Smith estaba "secuestrado" en el sótano del programa con unas esposas mientras pedía clemencia porque no le quedaban "más bolsas de caca" disponibles.

En segundo lugar y tras recoger el vídeo en cuestión de Facu Díaz, Bob Pop retuiteó un post de Javier Padilla del 25 de noviembre de 2022. El programa de Atresmedia recogió su intervención sobre las desigualdades sanitarias entre hombres y mujeres: "Ustedes aplauden a Torrente, a Pablo Motos o al señor sin camiseta y con un casco con cuernos que asaltó el Capitolio como modelo a seguir sin entender que Torrente o Pablo Motos son un peligro para sí mismos".

"Recibí un mail de la productora de 'El Hormiguero', que querían hablar conmigo sobre lo que había dicho en la Asamblea de Madrid. [...] Lo de ayer es un nuevo episodio de lo mismo pero más a lo grande (no es lo mismo un diputado en una cámara regional que un ministerio, obvio). La diferencia es que lo mío fue una charla cordial donde se me trató de explicar que 'todo eso era algo de antes' y que ya había cambiado", sentenció respecto a la llamada de aviso.

En tercer lugar, Bob Pop se hizo eco de otro comentario de Raúl Salazar. "Esto que dice Facu Díaz lo puedo confirmar. A mí mismo me llamó de buen rollo un lacayo de Pablo Motos por unas viñetas. Y no he sido el único colaborador de El Jueves al que le ha pasado". Tras este recordatorio, el humorista hizo una pausa para compartir una alegación: "Y a este sin parar se le unen los mensajes privados que me llegan de colegas a quienes Pablo Matons intentó que echaran de sus curros por hablar o escribir sobre él. Pero, oye, es que ya no se pueden hacer chistes de nada".

Convierte a Pablo Motos en tendencia

En cuarto y último lugar, Bob Pop se encargó de hacer saber su parecer respecto a que Pablo Motos terminase convirtiéndose en tendencia. Es más, no perdió la oportunidad de republicar el hilo donde Rayden aseguraba haber tenido avisos por parte del programa para intentar "justificar las actitudes machistas" del presentador. Por otro lado, también respaldó la siguiente opinión de una usuaria de Twitter, la red social ahora conocida como X.

"Ahora que hablamos todas de lo de Pablo Motos, recordemos lo de la campaña del 'Entonces Quien' del Ministerio de Igualdad. No es que nos llamase alguien, es que se pasó semanas insultándonos con total normalidad. Y no, no costó un millón de euros", sentenció para finalizar.