Este miércoles, 11 de septiembre, Aída Nízar ha sufrido una agresión física en riguroso directo. Desplazada la localidad gaditana de Sanlúcar de Barrameda, la colaboradora de Ni que fuéramos Shhh ha intentado solucionar un problema de presunta inquiokupación en la casa de Manu Tenorio. De un momento a otro, y con fallos de conexión, las cámaras han captado como una mujer la emprendía a empujones contra el último fichaje del problema.

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María Patiño, en shock, no daba crédito ante lo que estaba ocurriendo. En pantalla se ha podido ver a una mujer empujando a Aída Nízar a las puertas de un bar. "¿Qué está pasando? ¡Oye! ¡No, no, no, no! Aída, mi vida… ¡Ya!", se ha escuchado pronunciar a la presentadora mientras miraba atónita las imágenes en riguroso directo.

Minutos después, Aída Nízar ha vuelto a aparecer en una conexión en directo desde Sanlúcar de Barrameda, ya lejos del establecimiento antes mencionado: "Me han recibido a las 10:00 horas con las espadas en alto. Nosotros hemos ido con toda la tranquilidad a un restaurante. […] Nos han rociado de lejía, nos han rociado con mangueras, nos han escupido, nos han insultado…".

"Me he limitado a ir al restaurante y me he encontrado a la presidenta tomando un chupito. La que había fingido que tenía un ataque de ansiedad. Cuando la hemos pillado con la cámara, se ha puesto hecha una energúmena", ha continuado explicando Aída Nízar. A lo largo de su intervención en Ni que fuéramos Shhh, la nueva colaboradora ha lanzado la siguiente cuestión al aire: "¿Por qué están apoyando tan vehementemente a los inquilinos okupas?".

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Finalmente, la Policía no ha tenido más remedio que intervenir y la conexión ha tenido que finalizar. Eso sí, la colaboradora ha querido dejar constancia de que había testigos: "Ellos son del brillante programa TardeAR, mi competencia, pero usted ponga Ten. Adiós, agentes".

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