Un fenómeno deportivo, mediático y futbolístico ha nacido en España. Tras dejar boquiabiertos a los seguidores culés durante el Trofeo Joan Gamper, el joven delantero del Barça, Lamine Yamal, es protagonista de todas las charlas elogiosas entre aficionados, así como centro de las noticias de los medios de comunicación deportivos. Esa es la consecuencia de su reciente exhibición de lujo en el primer equipo del Barça, lo que ha generado una enorme ilusión entre los aficionados azulgranas. De su súbita y enorme popularidad tras su explosión deportiva, da cuenta el enorme apoyo recibido en redes sociales, superando los 2 millones de seguidores en Instagram.

Pero detrás del joven futbolista de 16 años recién cumplidos, que ya antes hizo historia al ser convocado por Xavi para el primer equipo con solo 15 años, hay una historia y distintas curiosidades que relatar.

Criado en un “estercolero multicultural del cinturón rojo de Barcelona

Yamal se crio en una zona obrera y multiétnica enclavada en el cinturón rojo de Barcelona. Su nombre completo es Lamine Yamal Nasraoui Ebana. Nació el 13 de julio de 2007 en Esplugas de Llobregat y vivió en Granollers y Mataró. Es, por tanto, un joven español catalán, como tantos otros, aunque nacido en el seno de un matrimonio de padre marroquí y madre ecuatoguineana. La mayor etapa de la vida de Yamal transcurrió en el barrio de Rocafonda, una zona de las más humildes de Cataluña, un barrio al que la ultraderecha calificó xenófoba y despreciativamente como “estercolero multicultural”.

Lamine Yamal tiene 16 años recién cumplidos y estudia tercero de ESO. Como tantos jugadores con futuro del Barça, vive en la Masía del club desde los siete años de edad. Es de carácter discreto y sencillo y está dotado de un buen sentido del humor. Le encanta jugar al futbolín con sus compañeros de la residencia.

Celebra los goles señalando el código postal de su barrio de clase obrera

Lamine no olvida sus orígenes y mantiene intacta la conciencia de clase y raza, aunque se halle en el selecto grupo que constituye la millonaria plantilla del Barcelona CF. Como se ha mencionado anteriormente, Lamine creció en una zona muy pobre y deprimida del Maresme barcelonés como es Rocafonda. Este barrio fue construido para el alojamiento de población procedente de Mataró y de fuera de Cataluña: andaluces, extremeños, murcianos, castellanos... En su mayoría de clase obrera. En los años noventa, comenzó a acoger inmigrantes procedentes del Magreb y del África subsahariana, de América Latina, Oriente y Europa del Este. Pero lejos de ocultar ese origen, Lamine se siente orgulloso de sus raíces. Un ejemplo demostrativo de ello, lo constituye el hecho de que la pasada temporada celebrase un gol contra el Mallorca haciendo un 3, un 0 y un 4 con los dedos. Con ese gesto estaba señalando el código postal del barrio de Rocafonda, el 08304.

El padre atacó a una carpa de Vox

Como mencionábamos antes, es el “estercolero multicultural”, el adjetivo despectivo con el que califica la extrema derecha a Rocafonda, el barrio donde se crio Lamine. Parece lógico que a los inmigrantes de esa zona no les cause simpatía alguna los postulados xenófobos de VOX. A Mounir Nasroui, padre del joven jugador, inmigrante marroquí establecido en Barcelona, tampoco.

Eso, sin justificar la acción en absoluto, pudo provocar que el pasado 16 de mayo, el padre del futbolista, protagonizara un enfrentamiento con un grupo de militantes de VOX que hacían campaña de las elecciones municipales. Los hechos ocurrieron en la plaza de Rocafonda de Mataró. El progenitor de Lamine Yamal se acercó a la carpa de la formación ultra y se enfrentó a los militantes que hacían campaña con insultos y empujones. En un momento dado, llegó a dar una patada al stand del partido de Abascal. Al ir el incidente a más, cuatro agentes de los Mossos d'Esquadra tuvieron que intervenir. Fue acusado de los delitos de amenazas, lesiones y desórdenes públicos que acabaron con una rotura de gafas de un militante.

El padre de Yamal, la promesa del Barça, tuvo un enfrentamiento con militantes de Vox

Un juzgado le condenó a pagar una multa de 546 euros por los delitos leves de maltrato y de daños con la agravante de discriminación ideológica. El partido de extrema derecha, que ejerció la acusación particular en el caso, había solicitado una sanción de 2.250 euros. La Fiscalía solicitó aplicar la atenuante de confesión, ya que reconoció los hechos cuando los Mossos le apartaron de la carpa mientras increpaba a los militantes de esta formación. Según el texto del tribunal, el ultra agredido no requirió de ningún tipo de asistencia médica.  

Récord de precocidad en el fútbol español

Más allá de ese incidente, Lamine es todo un caso de un adolescente con todas las papeletas para llegar a ser un crack y un ejemplo de la igualdad, superación e integración entre razas, credos o escalafones sociales. Un paradigma de lo que la ultraderecha y los reaccionarios xenófobos no quiere para España.
Un dato para resaltar la evolución y el esfuerzo de este adolescente que va camino de ser un gran crack del fútbol mundial. Lamine Yamal saltó a la fama tras debutar con 15 años, 9 meses y 16 días debutó con el primer equipo del FC Barcelona durante en el partido de Liga ante el Betis. Eso fue el 29 de abril de 2023 y ahí consagró un nuevo récord de precocidad en el fútbol español. Su representante es el agente de grandes estrellas futbolísticas, Jorge Mendes, la mano derecha de Cristiano Ronaldo, antes lo fue el exfutbolista Iván de la Peña. Es internacional juvenil con España.