La bloguera británica Anna Whitehouse suele hablar sobre temas relacionados con la maternidad con cierta labor pedagógica y de denuncia. El último tema que ha tratado ha sido la sensibilidad que tiene la gente con las mujeres embarazadas y, en concreto, si les ceden el asiento en el metro.

Para ello, se fue al suburbano londinense con una cámara oculta. El video resultante muestra como muchas personas se hacen las despistadas al ver a la premamá. Además, el video recoge los datos de un estudio que muestra, por ejemplo, que solo el 60% de los británicos ceden sus asientos en este tipo de situaciones. Mismo porcentaje que reclama un mayor número de señales de asientos reservados. Tres de cada diez personas no cederían su asiento a no ser que la futura madre se lo pida.

Es cierto que muchas personas ceden su asiento amablemente y otras van tan absortas mirando su teléfono móvil que no atienden a lo que pasa a su alrededor y realmente ni siquiera la ven. Pero es sorprendente el número de viajeros que, aún viéndola, prefieren disimular y quedarse sentados cómodamente.

Whitehouse reclama una mayor empatía de la población con las embarazadas por las obvias consecuencias físicas que conlleva la gestación. Con ese objetivo, anima a que las futuras madres pidan amablemente el asiento si lo necesitan o que lleven un distintivo.