La situación personal del exdirigente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, cambió radicalmente el día en el que la Selección Española de fútbol femenino ganó el título mundial. Concretamente el 20 de agosto de 2023, el natural de Motril besó sin consentimiento a la futbolista Jenni Hermoso, una polémica acción que desató un enorme vendaval de consecuencias públicas y privadas. Entre las primeras, el rechazo unánime de todo el mundo del fútbol a la figura de Rubiales, su inhabilitación por parte de la FIFA y su cese como presidente de la RFEF. Y entre las segundas, por ejemplo, el verse obligado a vender un ático de lujo en Madrid que suponía uno de sus bienes más preciados, con motivo de una complicada situación económica al haber sido rescindido de sus responsabilidades.

La decisión fue rápida: sólo le tomó unos días poner a la venta el inmueble en el que vivía en la calle Ferraz. La vivienda, adquirida por Rubiales en mayo de 2021, salió a la venta con un precio de 2.550.000 euros y, de acuerdo con El Español, el exdirigente ha conseguido venderla.

Según se ha conocido recientemente de la mano de varios medios, Rubiales percibía un sueldo de 900.000 euros anuales como presidente del fútbol español y vicepresidente de la UEFA y habría afrontado los costes de esta vivienda con la ayuda de 3.000 euros al mes que la Federación le correspondía. Ahora, al haberse quedado sin dichos ingresos, se ha visto en la obligación de venderla.

¿Cómo es el ático de Rubiales?

El ático, antes de cambiar de propietario, había sido anunciado en diferentes portales inmobiliarios. Se trata de una vivienda de lujo cercana al parque del Oeste y del Templo de Debod, con una superficie construida de 141 metros cuadrados.

Cuenta con una cocina equipada con electrodomésticos de alta gama, un salón comedor con conexión directa a una amplia terraza, tres dormitorios y tres baños en suite. A su vez, a pesar de que el edificio dispone de una piscina comunitaria, el ático cuenta también con una piscina privada ubicada en la citada terraza, de 115 metros cuadrados.

Adicionalmente, la casa tiene instalada domótica y calefacción radiante, de acuerdo al anuncio publicado. Y además de la vivienda en sí, el comprador dispondrá de un almacén / trastero de seis metros cuadrados y de dos plazas de garaje que suponen cerca de otros 20 metros cuadrados de espacio.

Destacar también que la comunidad de vecinos tiene amplias zonas verdes e incluso su propio gimnasio. Recordar, también, que antes de deshacerse de la que ha sido su vivienda habitual desde 2021, Rubiales cambió su residencia a las afueras de Madrid, en Las Rozas.

Continúa el caso: Hermoso sufrió coacciones

Volviendo a la repercusión del caso Rubiales, este lunes se han escuchado las declaraciones de las tres jugadoras de la selección española de fútbol, Alexia Putellas, Irene Paredes y Misa Rodríguez. Las tres jugadoras han declarado al respecto de las presuntas coacciones que sufrió su compañera, Jenni Hermoso, tras recibir un beso forzado del expresidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, durante la celebración del mundial que ganó España en Sidney, Australia, así como sobre si el beso fue o no forzado. Las tres han avalado lo contado por Hermoso en su denuncia ante la Fiscalía.

Según fuentes cercanas al caso, las compañeras de Hermoso habrían presenciado las coacciones a las que, varios miembros de la RFEF supuestamente sometieron a la campeona del mundo para que hiciera un comunicado, y saliera en un video con Rubiales, diciendo que el beso forzado fue consentido.
Además, también han declarado sobre las presiones a las que el director de la selección masculina Albert Luque y el director de marketing, Ruben Rivera, ambos imputados, sometieron a la jugadora mientras estaba de viaje de celebración con sus compañeras en Ibiza.

Uno de los puntos cruciales de las declaraciones ha versado sobre el momento en que, tras llegar al aeropuerto de Sidney, obligaron a Jenni Hermoso a bajar del autobús para que autorizara el comunicado en el que 'admitía' que el beso fue consentido. Un comunicado que, según la jugadora ella no autorizó pero que le dijeron que era obligatorio, a lo que supuestamente muy enfadada contestó "pues entonces haced lo que queráis". Las tres han avalado todo lo que Hermoso declaró en su denuncia ante la Fiscalía de la Audiencia Nacional: que sufrió coacciones y que el beso que recibió por parte de Rubiales fue en contra de su voluntad.