Silverio Nieto es un turbio personaje muy secundario en la trama Kitchen que afecta al PP, y es prácticamente desconocido para el gran público, pero cada vez más informaciones apuntan a su papel clave, no solo en la trama de corrupción popular, si no en numerosos asuntos sucios de la derecha y la Iglesia española.
Según los informes de la Fiscalía sobre la investigación de la trama de corrupción del PP, el cura y confesor personal del exministro popular Jorge Fernández Díaz, aparece involucrado por primera vez cuando se detiene al comisario Enrique García Castaño, 'El Gordo'. El topo de Villarejo en la policía se encontraba en compañía de Nieto cuando los agentes fueron a detenerle.
El eclesiástico fue calificado de "persona de confianza" en la declaración que 'El Gordo' dio en comisaría. Aunque Silverio Nieto es mucho más que el simple cura de las élites del PP. Nacido en Badajoz en 1947, Nieto ha sido marino mercante, informador franquista como policía en Madrid y para la Interpol en los años setenta.
Posteriormente, desarrolló una amplia carrera judicial que le llevó a ser uno de los jueces del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, donde se convirtió en mentor del actual presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes, tal y como se recogía en El Confidencial. Pero tras su distinguida experiencia entre policías y jueces, Nieto comenzó a trabajar para la Conferencia Episcopal y el Vaticano, especializándose en su defensa jurídica, principalmente en los asuntos relacionados con la pederastia. De hecho, este cura fue el que desarrolló el protocolo de la Iglesia española para encarar los casos de pederastia que van saliendo a la luz.
Un detective para tapar los casos de pederastia de la Iglesia
Sin embargo, algunas víctimas de los abusos sexuales de religiosos españoles han denunciado el papel de Nieto como el detective encargado de esconder los casos. Así lo relataba Juan Cuatrecasas, el padre que se enfrentó a los obispos españoles por los abusos sexuales sufridos por su hijo en un colegio del Opus Dei en Bizkaia: “Es un personaje que hizo las veces de fontanero de una parte del Vaticano y de la Conferencia Episcopal de aquel momento para engañarnos, sonsacar información y destruir la legitimidad del crédito de mi hijo, que era la víctima”, recoge El País.
Cuatrecasas ha contado cómo Nieto les hizo una visita en 2015 para sonsacarles todos los detalles de los abusos: “Al principio fue muy dicharachero, nos contó su vida. Luego se transformó y nos interrogó, sobre detalles extraños, la descripción de los lugares de los hechos... Al acabar se largó corriendo. En el juicio salió que después se fue al colegio y cambiaron todo en base a lo que habíamos contado para que no coincidiera. Hicieron obras, cambiaron el suelo, la puerta, las cortinas…”. Pero fue otra fresa que el religioso dedicó a su hijo la que se ha quedado marcada en la memoria de Cuatrecasas: “En la vida hay que ser un poco malote”.
La mística vinculación con el ultraconservador Jorge Fernández Díaz
Pero Nieto ha ofrecido una versión mucho más inocente de aquel encuentro: “Mi único encargo por orden del Vaticano fue ir a entrevistar al antiguo alumno que acusaba de abusos a un profesor, una entrevista cordial, sin problemas y amablemente atendido por sus padres de los que me despedí también cordialmente, y oír al profesor. Ambos se ratificaron en su versión. No tenía por misión investigar, no había medios para ello”.
El elegido de Mariano Rajoy para dirigir la cartera de Interior conoció a Nieto en la basílica de la Concepción de la calle Goya de Madrid, tras la revelación mística que, tal y como relató, tuvo en un viaje a Las Vegas y que le convirtió en un creyente ultraconservador.
En el informe de Anticorrupción en el que se pide la imputación de Jorge Fernández Díaz y de la exministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, también consta como Nieto intercedió para intentar librar al exministro de la imputación, aunque el cura del PP ha negado esas acusaciones limitando su participación a una simple conversación de amigos.
