“Creo que, viendo las portadas, hoy será un día agitado”. Con este vaticinio ha arrancado la entrevista en Onda Cero Pere Aragonés, vicepresidente y consejero de Economía y Hacienda de la Generalitat de Catalunya, quien ha asegurado que los 21 puntos distribuidos por el Govern no han sido aceptados por el Gobierno de Pedro Sánchez, al tiempo que ha insinuado que la figura del “relator” estaría limitada para una hipotética mesa de partidos a nivel estatal en la que se incorporaría Podemos.

La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, defendió que el “relator” sería una suerte de apuntador, un organizador de las conversaciones en la mesa entre partidos (únicamente catalanes) con el objetivo de dar cauce y catalizar el diálogo con Cataluña. Cabe recordar que en esa mesa tan solo están sentados el PSOE, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y PDeCat.

Aragonés ha precisado que esta mesa ya se ha reunido en hasta dos ocasiones y todos y cada uno de los acuerdos a los que se lleguen serán explicados de manera pública y conjuntamente, como ya se hizo en la declaración de Pedralbes. En este sentido, ha especificado que las conversaciones están en un punto muerto pero se está explorando la vía de “poder crear un espacio de diálogo para poder llegar a algún tipo de solución”.

Como la mesa actual no tiene mayoría institucional para poder cristalizar los posibles acuerdos que se alcancen, Aragonés ha afirmado que optan por ampliar la zona de diálogo y crear una mesa con partidos a nivel estatal porque se “depende de otra parte”, haciendo referencia explícita a Podemos, que es quien da “la mayoría al Gobierno”. Es en esa mesa donde entraría la figura del “relator”.

“La mesa de partidos de ámbito catalán” dice, “no necesita ningún tercer agente neutral” porque “ya se ha reunido dos veces y no ha necesitado esta figura”. Esta nueva maniobra respondería a la necesidad de alcanzar “consensos que después se puedan trasladar al ámbito institucional”.

“Cuando hay una situación compleja, si necesitamos más instrumentos para poder ordenar el debate, ¿por qué lo debemos rechazar? Me sorprende que haya estos aspavientos”, dice el vicepresident de la Generalitat.

Pere Aragonés ha denunciado que la derecha haya convocado manifestaciones y se lleve las manos en la cabeza: “Aquí parece que alguien ha cometido no sé qué delito por plantearse reunir en una mesa gente que piensa diferente”.

En cuanto a la terna de candidatos a “relator”, no ha aclarado si todos los nombres que han planteado al Gobierno son de personas internacionales, no españolas.

Con respecto al documento hecho público por la Generalitat con los 21 puntos que la derecha reprocha a Sánchez que haya aceptado, motivo por el cual le tildan de “traidor”, asegura que no es más que “nuestra visión, nuestro análisis, por dónde creemos que podría haber iniciativas”. Dichas demandas fueron entregadas al Gobierno, pero no aceptadas: “Si hay un acuerdo, ambas partes harán una declaración conjunta”.