Que el embarazo es quizás la etapa de la vida más bonita para una mujer, según lo afirman muchas de ellas, no es ninguna novedad. El problema es que, durante esos nueve meses, y en la etapa inmediatamente posterior, conocida como posparto, pueden surgir una serie de problemas de salud que impide a muchas mujeres disfrutar de su maternidad como deberían.

Algunos de estos problemas tienen que ver con la musculatura del suelo pélvico, la flacidez muscular de otras zonas del cuerpo, los dolores de cuello y espalda e incluso la famosa depresión posparto.

Suelo pélvico y bolas chinas terapéuticas

Fortalecer el suelo pélvico durante el embarazo es fundamental para tener un parto sin desgarros ni problemas posteriores que tengan que ver con la musculatura de la zona pélvica. Para ello, los famosos ejercicios Kegel son los recomendados por los especialistas dado que están destinados a fortalecer los músculos del suelo pélvico, que son los encargados de sostener la uretra, vejiga, útero y recto de la mujer. Su popularización vino dada por el doctor Arnold Kegel, un médico ginecólogo que recomendaba su práctica como medida eficaz contra la incontinencia urinaria, entre otros problemas.

Sea como sea, los ejercicios Kegel pueden practicarse de forma natural, realizando contracciones de la zona pélvica y aguantando la contracción durante 10 segundos, con un reposo posterior de otros 10 segundos para después continuar. También puede fortalecerse la musculatura pélvica mediante la ayuda de las llamadas bolas chinas terapéuticas. Dado que el 70% de las mujeres embarazadas puede sufrir incontinencia urinaria antes o después del parto, no está de más tenerlo en cuenta y comenzar a practicar estos ejercicios para intentar evitar este mal menor que afecta a tantas mujeres en el mundo.

Comprar en una tienda erótica online puede ser una solución para poner freno a las vergüenzas y comenzar a solucionar el problema de suelo pélvico que ha generado tu embarazo y que, como casi todo en esta vida, tiene solución. Busca las bolas Kegel, bolas terapéuticas o bolas chinas en cualquier tienda erótica de internet, como Mi Orgasmo, y comienza a recuperar el tono muscular de tu zona pélvica.

Flacidez abdominal y ejercicio físico para recuperar el tono

Los kilos que se engordan durante el embarazo, en su gran mayoría, suelen desaparecer tras un periodo mínimo después del parto. Sin embargo, muchas mujeres no recuperan su silueta y esos kilos de más, sumados a la flacidez de la piel que se ha estirado y ahora ha vuelto a su origen, supone todo un problema estético para las más coquetas.

Ante la aparición de estrías existen pocas alternativas que no requieran el paso por el quirófano, pero la flacidez sí tiene solución y pasa necesariamente por el comienzo de la actividad deportiva a partir de una fecha prudencial en la que tu médico te dé el “ok” para comenzar a hacer deporte. Salir a pasear puede ser una buena medida en un principio para después ir subiendo la intensidad con una carrera ligera, la bicicleta elíptica en casa o incluso un rato de gimnasio si el bebé te lo permite y tienes a alguien que pueda quedarse con él y atenderlo.

Dolores de cuello y espalda

La tensión y el peso de la tripa durante los nueve meses de embarazo, el estrés de los primeros días de cuidados maternales, el propio peso del bebé que pasa gran parte de su tiempo en tus brazos y la falta de horas de sueño de los tres primeros meses, pueden generar dolores fuertes de cuello y espalda que terminen derivando en contracturas musculares más serias. Por eso, es muy importante cuidar la postura durante los primeros meses de vida del bebé, sentarse con la espalda recta y dar el pecho con una buena posición, entre otras medidas, son factores indispensables para mantener tu columna vertebral libre de problemas y dolores.

Además de la prevención puedes optar por realizar una serie de ejercicios de estiramiento por la mañana y por la noche para destensar la carga de la espalda y aliviar a todos esos músculos que han trabajado de más durante el día. Si puedes, acude también a un fisioterapeuta a darte un buen masaje una vez a la semana. Si cuidas tu cuello y tu espalda desde el principio, no tendrás mayores problemas.

Depresión posparto

Es un problema más común de lo que podría pensarse y puede surgir durante el embarazo o durante el año posterior al parto. El problema es que algunos de sus síntomas pueden confundirse con la etapa maternal, como pueden ser los signos de cansancio, falta de energía, problemas para dormir o incluso los cambios emocionales que pasan por alegría, tristeza o llanto. La solución ante este problema no es otra que acudir al médico para que te proponga una visita con el experto en psicología de tu centro médico si fuese necesario.