“Tu eres mi apuesta para el mejor futuro que debemos ganar para España”, dijo Adolfo Suárez (Jr.) en la presentación de la conferencia que Pablo Casado dio el día en el que se oficializó el apoyo de María Dolores de Cospedal a su candidatura del hasta entonces vicesecretario de comunicación del PP, a lo que el hoy presidente popular contestó en su twitter: “Adolfo Suárez Illana es una referencia a nivel profesional, político y depositario del legado de su padre, el gran Suárez. Abracemos la concordia y apelemos a la ambición de futuro”.

Las campanas de la séptima planta de la sede madrileña de Génova 13 se echaron al vuelo y comenzaron a tañer una sintonía aun por nombrar, ya que el “torero” Adolfo Jr. no forma parte de la Junta Nacional ni del Comité Ejecutivo elegido por Casado para llevar las riendas de los conservadores durante los próximos cuatro años, eso sí el culebrón del máster no altera sus propósitos, pero está claro que se encuentra a su derecha y cierta prensa lo presenta como el artífice de la victoria del joven palentino sobre la madura vallisoletana.

A la sombra derecha del nuevo líder

El caso es que Adolfo Suárez Jr. fue, junto al “traidor” José Ignacio Echániz, como nombran los “cospedalianos” al que fuera consejero de Sanidad de Cospedal en Castilla-La Mancha (2011-2015), los dos principales acompañantes de la entrada triunfal de Pablo Casado en el hotel Marriot Auditorium cuando ya conocía su abultada victoria en el asalto final de los compromisarios de las llamadas elecciones primarias del PP. Por eso llama la atención que Suárez Illana no esté en el equipo de Casado, a no ser que el nuevo presidente de los conservadores tenga ya decidido el lugar dónde se sentará el hijo del primer presidente democrático desde la II República, y que no podrá ser otro que a su derecha, si es que se materializa el supuesto nombramiento. ¿Pero quién es verdaderamente Adolfo Suárez Jr.?

Suárez y Echániz, detrás de Casado, en su entrada triunfan en el hotel

Paracaidista en Castilla-La Mancha

Suárez Illana llega a Castilla-La Mancha en 2003 de la mano de José María Aznar para hacer frente a José Bono, uno de los barones socialistas con mayor proyección y apoyo electoral. Suárez Jr. cosechó el peor resultado jamás obtenido por el PP en tierras castellano-manchegas, convirtiendo a Bono en el presidente autonómico con el mayor porcentaje de votos de la historia reciente de España.

Cómo sería la humillación, que Adolfo Suárez se negó a tomar posesión de su acta de diputado regional, siendo el primer político en la historia autonomista de España que renunciaba a su escaño sin ni siquiera tener la decencia política de pisar las Cortes de Castilla-La Mancha. “Salió huyendo, dejando al PP sumido en la desesperación, al comprobar que, una vez más, Madrid había impuesto a un señorito sin arraigo territorial”, comentan fuentes del PP castellano-manchego a ELPLURAL.COM

Las meteduras de pata de “Adolfito”

“Cuando leo estos días que Adolfo Suárez Illana es el artífice de la victoria de Casado, no doy crédito, ya que quien escribe esto es que no conoce a Adolfito, o es que, sencillamente, le han informado muy mal”, añaden, al mismo tiempo que nos recuerdan las meteduras de pata de Jr. en su caótica campaña electoral de las elecciones de 2003, como cuando trasladó sus condolencias a los familiares del guardia civil asesinado por ETA en Leiza (Navarra), “que ya no podrá disfrutar de las cebollas rellenas de su querida Sama de Langreo”, dijo.

O esta otra avalando las reformas económicas de Aznar, “cuando otros andaban recorriendo calles con pancartas, tirando huevos, tirando piedras, poniendo bombas y abriendo cabezas de alguno de nuestros militantes”, y ya puestos a la galería de despropósitos sus ideas para combatir la burbuja del ladrillo, que pasaban por ayudar a la compra de la segunda vivienda y así combatir también las zonas rurales y potenciar el turismo. Y todo esto no es broma.

Ibarra pidió “un candidato torero”

Como tampoco es broma su desaforada afición por los toros (está casado con una hija del ganadero Samuel Flores). Tanto que el otrora presidente de la Juta de Extremadura y en 2003 candidato también del PSOE extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, pidió al PP de la comunidad que le enviarán “como a Pepe (Bono) un candidato torero”.

Y es que Adolfo Suárez Jr. no dudaba en vestirse de corto para lidiar toros o novillos, a pesar de no contar con los permisos pertinentes, como dejó patente la Asociación Nacional para la Protección y el Bienestar de los Animales (ANPBA)  en 2003, que presentó varias denuncias ante la Delegación de la Junta de Castilla-La Mancha en Ciudad Real contra la Hermandad de Nuestra Señora de la Fuente, organizadora de un festejo taurino en Villanueva de la Fuente, en el que se “picó” a los toros sin autorización, festejo que fue protagonizado por Suárez Illana, que también fue denunciado.

suarez y casado en los toros

Utilización de su padre en campaña

La campaña del “candidato torero” fue caótica, triste y para no recordar. Tanto que los mentideros de 2003 señalan que Adolfo Suárez padre, preocupado por la triste imagen de su hijo, llamo a Bono para rogarle que fuera benévolo con su vástago, llamada que nunca ha sido desmentida por el también expresidente del Congreso de los Diputados.

Sin embargo, lo que todavía no se ha olvidado en Castilla-La Mancha fue la utilización del PP de la figura de Adolfo Suárez padre en la campaña de su hijo en 2003. Fue en un mitin en Albacete, con la presencia de José María Aznar, donde Suárez subió a la tribuna de oradores y en un momento de su intervención no recordaba muy bien lo que tenía qué decir ni por qué estaba allí. En aquel entonces era patente la huella que empezaba a dejar el Alzheimer, enfermedad que finalmente acabó con su vida en 2014.