El ejército de Israel ha lanzado un nuevo bombardeo sobre el sur de Beirut, la capital del Líbano, dirigido contra lo que se presume es la sede de Inteligencia de las milicias del partido chií Hezbolá. Este ataque se enmarca en un contexto de creciente tensión en la región.
Simultáneamente, se ha ordenado la evacuación forzada de los residentes de los barrios de Haret Hreik y Hadath Beirut, en la periferia sur de la ciudad. Estas zonas son consideradas bastiones de las milicias chiíes y han sido el foco de las recientes operaciones militares.
En un comunicado, Israel ha confirmado la muerte de tres altos integrantes de Hezbolá: Alhaj Abas Salama, comandante del frente sur; Racha Abas Awacha, un enlace de alto nivel; y Ahmed Ali Hosein, especialista táctico. Estas bajas se añaden a la escalada de hostilidades observadas en las últimas semanas.
Además de la capital, los bombardeos israelíes también han alcanzado otras partes del sur del Líbano, incluyendo las localidades de Deir Seriane y Taybé, en el municipio de Marjayun, así como Nabatiyé y Tiro. Estos ataques han sido documentados por el diario 'L'Orient le Jour', aunque no se ha proporcionado un recuento oficial de víctimas.
Hezbolá ha reconocido haber lanzado un ataque con cohetes a las 08:30 contra una posición militar israelí en Sadane, ubicada en las disputadas granjas de Shebaa. Este acto parece ser una respuesta directa a los bombardeos israelíes, marcando otro capítulo en el intercambio de hostilidades que agrava la situación en la frontera entre ambos países. La situación en el Líbano continúa siendo extremadamente volátil, con ambos bandos mostrando una disposición creciente hacia la confrontación militar.