Fernando González ‘Gonzo’, colaborador de El Intermedio, ha vuelto tras 15 meses a la Franja de Gaza donde ya realizó un impactante reportaje sobre la situación en la que se encontraban sus habitantes en medio de constantes bombardeos indiscriminados del ejército de Israel.
En este caso, la situación que se ha encontrado, tras casi un año del fin de la guerra, no es mucho mejor y no se espera que cambie a corto plazo. Según el reportaje, la población gazatí ha seguido sufriendo las duras condiciones de un bloque que se inició ya hace ocho años. A esto se suma que la reconstrucción de las más de 22.000 casas destruidas o dañadas durante los bombardeos de hace diez meses aún no ha comenzado y más de 100.000 personas no han podido regresar a sus hogares.
Un problema político de fondo
Una de las entrevistas que ha realizado Gonzo en su viaje ha sido al comisario general de UNRWA (Agencia de Naciones Unidas para los refugiados de Palestina en Oriente Próximo) que se lamentó por la situación “extrema” que vive la población en Gaza y también porque muchos países que tiene voluntad de ayudar a la reconstrucción no lo hacen porque en unos meses puede volver el conflicto y destruirse todo otra vez. Sobre esto, el comisario general Pierre Krähenbühl pidió que, aparte de en reconstruir, “hay que involucrarse en intentar resolver la situación a nivel político”.
Ayuda que no llega
También en el propio plató del Intermedio se entrevistó a la directora ejecutiva de UNRWA Raquel Martí que explicó que los 5.400 millones de dólares que se acordó enviar para la reconstrucción de Gaza en la Conferencia de El Cairo aún no han llegado ocho meses después del acuerdo y que tienen “pocas esperanzas” de que lo hagan. Además, Martí explicó que, de no levantarse el bloqueo y llegar las ayudas comprometidas, la reconstrucción de Gaza podría tardar “más de 20 años”.
Datos preocupantes
Según la misma UNRWA, en la franja de Gaza viven más de 1.8 millones de personas y su situación ha empeorado gravemente desde la última ofensiva israelí dejando, junto con los años de bloque, al 80% de la población dependiente de la ayuda internacional, siendo esta zona donde se registra la mayor tasa de paro del mundo, especialmente entre los jóvenes.
