Las nuevas elecciones marcarán el devenir de Ciudadanos. Algo lógico aritméticamente, pero en el partido naranja se libra una batalla interna. El futuro de Albert Rivera está sobre la mesa: su anhelo de conseguir vencer a Pablo Casado, derechizando su discurso y negando cualquier tipo de entendimiento con el PSOE, ha provocado que sean muchos los críticos que empiecen a levantar la voz frente a un oficialismo que les ha negado la posibilidad de opinar sistemáticamente en los últimos meses (Ejecutiva reforzada con personas afines, defenestraciones y dimisiones en cadena, amenazas de expulsión…).

Pero el líder naranja​ a nivel nacional no es el único que corre peligro. La hoja de ruta si hay que tratar de vencer a Rivera en unas primarias está escrito: los pactos con Vox han provocado que los valores iniciales de la estructura se hayan difuminado, perdiendo el perfil propio y quedando relegados a un papel de muleta popular sin poder de decisión.

Mensaje de rechazo a la extrema derecha y a aquellos que los hicieron posibles. Andalucía, Madrid y Murcia son algunos de los lugares donde Ciudadanos, pudiendo retomar el rumbo, ha decidido servirse de los votos de la extrema derecha con ominosos apretones de manos en cenáculos privados y alejados de la prensa.

Fuentes de la formación informan a ElPlural.com de que uno de los dirigentes peor valorados internamente es Ignacio Aguado. Juan Carlos Bermejo, quien compitió con él en las primarias madrileñas, denunció pucherazo en los resultados. La Comisión de Garantías del partido llegó tarde y mal, haciendo que estas afirmaciones sigan lastrando la mochila de un Ignacio Aguado al que, junto a Isabel Díaz Ayuso y Rocío Monasterio, ya le llueven las críticas en la Comunidad de Madrid.

Per Bermejo no ha sido el único que ha puesto entre la espada y la pared al líder naranja en Madrid. El periodista Enrique de Diego denunció una presunta red de financiación irregular montada por Aguado hace tiempo.

"Ignacio Aguado, portavoz de Ciudadanos en la Asamblea de Madrid, ha presentado una querella criminal infundada, maliciosa y temeraria contra nuestro editor, Enrique de Diego, por informar verazmente de que en la campaña de las municipales y autonómicas de 2015, Ciudadanos estableció un sistema de financiación al margen del marco legal, obligando a los candidatos a financiarse su campaña, al margen de la contabilidad del partido y sorteando la preceptiva fiscalización del Tribunal de Cuentas", apuntan desde Rambla Libre, medio que dirige el propio de Diego.

Rufo Benito, exportavoz de Ciudadanos en San Lorenzo del Escorial, también declaró en contra del dirigente públicamente: “Ordenó desarrollar un sistema de financiación ilegal en la campaña electoral de 2015". Según Rufo Benito, desde el partido se les avisó de que ellos "no pagaban nada" y que la campaña se la debían costear ellos mismos. 

De Diego pide que testifique

Después de que Aguado denunciase a de Diego por injurias, el editor de Rambla Libre, de posiciones ultraconservadoras, ha solicitado acogerse al principio jurídico de “Exceptio Veritatis”, la facultad que se otorga al autor del delito de injurias para que pruebe la verdad de sus afirmaciones. Para ello, De Diego ha solicitado al juzgado que Aguado presente distintos documentos, además de la comparecencia del propio presidente de la formación a nivel nacional, Albert Rivera.