El PSOE y el PSC han emitido un comunicado conjunto para responder a la exigencia de ERC y Junts de dar pasos hacia el referéndum para dar su 'sí' en la próxima investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. Los socialistas han sido escuetos pero contundentes para cerrar la puerta al referéndum, y para ello han remarcado su apuesta firme por el diálogo siempre dentro de la Constitución: "El PSOE y el PSC reiteran su voluntad de apostar por el diálogo como la única forma de garantizar el progreso y la convivencia en Cataluña".

"Un diálogo que ha de servir para superar la división y no para profundizar en la ruptura y la discordia que tanta tensión generó de forma estéril en Cataluña y en el resto de España. Por ese camino, no hay avance posible", afirman en el escrito, añadiendo que "el camino es el de la convivencia y la cohesión, el entendimiento y el progreso económico y social de Cataluña y del resto de España, siempre dentro de la Constitución". "En las últimas elecciones generales, la sociedad catalana en particular, y la española en su conjunto, han apostado de manera amplia por un gobierno progresista que continúe la senda de diálogo, acuerdos y concordia iniciada hace cuatro años, y no por mirar al peor pasado sino por seguir construyendo juntos un futuro mejor", concluyen.

En redes sociales, Salvador Illa, líder del PSC, ha difundido el comunicado con un mensaje en la misma línea: “No vamos a contribuir a la división de la sociedad catalana. Por este camino no hay recorrido”.

Las exigencias de ERC y Junts

ERC y Junts han pactado este jueves una propuesta de resolución para el Debate de Política General (DPG) que insta al Parlament a dar su aval a que los partidos catalanes no apoyen la investidura de Sánchez "si no se compromete a trabajar para hacer efectivas las condiciones" para celebrar el referéndum.

Después de una larga negociación para ultimar el acuerdo ante la última sesión del Debate de Política General, ambas formaciones independentistas han mostrado sus exigencias para apoyar la investidura del candidato socialista, aunque sin contar con el apoyo de la CUP, formación que necesitarían para que prospere, ya que por si solos ERC y Junts no tienen mayoría absoluta en la Cámara.

La iniciativa sobre la autodeterminación acordada por ERC y Junts, sin la CUP, se votará este viernes como una resolución transaccional. Y, en ella detallan, en primer lugar, que el Parlament manifiesta que "la resolución del conflicto político entre Cataluña y el Estado español pasa por la vía política y democrática" y, ante esto, se reafirman en la necesidad de que "Cataluña pueda decidir su futuro colectivo a través de un referéndum".

Por otro lado, y tras la jornada de negociaciones, ERC, Junts y la CUP han transaccionado una propuesta que apoya una ley de amnistía para los procesados en causas "en relación a la defensa del derecho a la autodeterminación" y que insta al Govern y a las instituciones catalanas a implicarse para conseguirla. Es así como los grupos emplazan al Govern a que lleve a cabo "todas las acciones necesarias" para incluir en la amnistía a todos los represaliados "por motivos políticos" por "defender los derechos y las libertades" en el marco de conflicto social y político. De esta forma, han pedido que esta norma se base en el proyecto que las tres formaciones independentistas presentaron en el Congreso de los Diputados en 2020 y que no consideró la Cámara.

Hasta el momento, ERC y Junts habían sido incapaces de dibujar una hoja de ruta común para abordar la próxima investidura de Pedro Sánchez y sus exigencias con Cataluña, por lo que esta primera alianza trasciende y apunta a la posibilidad de que ambas formaciones catalanas acaben acordando el precio de la reelección de Sánchez. No obstante, sus numerosos desencuentros anteriormente no harían rara la llegada de nuevas diferencias.

Sobre la amnistía y el referéndum ya se había pronunciado Oriol Junqueras, presidente de ERC, en la mañana de este jueves a las puertas del Congreso de los Diputados. "Queremos que haya una amnistía porque estamos convencidos de que nadie debe ser condenado ni perseguido por algo que no es delito. Convocar y celebrar un referéndum no es delito porque no está recogido en el Código Penal", afirmaba ante los periodistas, añadiendo que el apoyo a Sánchez en su investidura "dependerá de la actitud que tenga el PSOE, también en el ámbito de restablecer la justicia".